Las dudas sembradas por Marc Valiente en la derrota rojiblanca en Ipurúa podrían germinar en un cambio en el centro de la zaga sportinguista, donde Babin, intocable como primer central, podría cambiar de acompañante. Quiso David Gallego, nada más sonó el pitido final del encuentro, salir en defensa del central catalán arrogándose, al menos, uno de sus dos errores más groseros: el del primer tanto, cuando Valiente cedió atrás el balón a Mariño sin ver la llegada de Stoichkov, que la rebañó para anotar. “Yo le dije que jugara con portero, me la como yo”, explicitó el técnico de Suria, ejerciendo de parapeto y evitando señalar a uno de sus jugadores. Un futbolista que, no obstante, volvió a salir en la fotografía del tercer y definitivo gol, cuando Blanco Leschuk le ganó el duelo aéreo.
Dos errores que costaron una derrota y que abren un debate que nunca terminó de estar cerrado: el del acompañante de Babin en el centro de la zaga. Una terna a la que este curso se sumó un nuevo candidato con la llegada de Juan Berrocal en el mercado de verano, cedido por el Sevilla. No estaba su incorporación en los planes de la dirección deportiva ni del cuerpo técnico antes de comenzar la ventana estival de fichajes, pero ninguna de las dos partes dudó a la hora de aprovechar una de las conocidas como “oportunidad de mercado” para poder así incorporar a un central joven, con condiciones y mucha proyección.
El tercero en discordia está siendo, este curso, Borja López. El gijonés, uno de los primeros en protagonizar la operación retorno al Sporting del talento “fugado”, llegó con el cartel de refuerzo de lujo y garantías. Una condición que demostró en el campo, pero que ha ido perdiendo con el paso del tiempo. Llama la atención que el zaguero gijonés fuera el único en disputar todos los minutos de juego durante la primera vuelta del pasado curso, hasta que Valiente se recuperó de su lesión. Borja López pasó, de un día para otro, de ser el jugador más utilizado por David Gallego a no contar para el técnico de Suria. Hasta el punto de ser el único defensor central que no ha debutado aún en lo que va de campeonato, con cero minutos a sus espaldas.
Es evidente que Valiente es el favorito de David Gallego. Así lo reafirmó el técnico en rueda de prensa tras el partido. “Nos da muchas cosas”, subrayó. Se refería, sobre todo, a la salida de balón. Una cualidad de gran importancia en el esquema del de Suria. Sin embargo, sus errores del pasado fin de semana han puesto el foco sobre él, reabriendo el debate.
Hasta el momento, Valiente suma 528 minutos de juego en los seis partidos disputados del campeonato, en los que participó siempre como titular. Además, cuenta con un gol en su casillero, contra el Girona, que a la postre valió al Sporting para sumar los tres puntos. Por su parte, Berrocal tuvo la ocasión de saltar al terreno de juego hasta en tres ocasiones este curso, aunque su aportación hasta la fecha haya sido testimonial, con apenas un cuarto de hora de juego repartido entre los tres encuentros. Borja López, por el contrario, aún no ha debutado, relegado a un papel de cuarto central.
Defensa de tres
Cabe destacar, además, que en los minutos finales del encuentro de Ipurúa, Gallego probó por primera vez esta campaña con un esquema de tres centrales, juntando a Babin, Marc Valiente y Berrocal, con Bogdan y Puma Rodríguez como carrileros. Un esquema que no se descarta que pueda volver a utilizarse en otras circunstancias similares durante lo que resta de temporada, según las exigencias del rival y del encuentro, rompiendo con el habitual 4-2-3-1 del técnico catalán. Del experimento de Ipurúa apenas se pueden sacar conclusiones, ya que tuvo escaso recorrido temporal.
