La contracrónica del Sporting-Villarreal B: el gran batacazo entre los aspirantes, gesta del peor visitante, grieta en El Molinón y el fin de un talismán

El Sporting se apaga y queda tocado en el instante clave, con el mayor patinazo de los equipos de la zona alta, que siguen desaprovechando oportunidades

Gaspar intenta realizar un control en una jugada de ataque del Sporting. | Marcos León

Gaspar intenta realizar un control en una jugada de ataque del Sporting. | Marcos León

Pablo Antuña

Pablo Antuña

Batacazo bochornoso ante el colista y peor equipo a domicilio de Segunda

En el momento clave, cuando la jornada se iniciaba con pinchazos entre los aspirantes, sin despegar los más cercanos en el ascenso directo, y con los perseguidores al play-off también sin ganar, el Sporting desaprovechó una oportunidad magnífica para reforzar su candidatura. Porque hay derrotas y derrotas. Pero el golpe de perder ante el colista, y peor equipo a domicilio, con un sonrojante 0-3 en casa, puede ser de esos mazazos definitivos de los que ya no es capaz de levantarse. Las matemáticas indican que aún se puede conseguir todo, pero la imagen y dolor con el que los rojiblancos fueron superados por el Villarreal B provoca que para muchos la cotización e ilusión de ver a los de Ramírez en la pelea final se haya caído a las cotas más bajas. El Sporting se apagó en un partido en el que no funcionaron ni las piernas ni la cabeza. Sobrepasados en todas las disputas, en la colocación y en intensidad, el Villarreal B logró en El Molinón su segundo triunfo del curso a domicilio. Solo antes habían ganado fuera en otra ocasión, por 0-1 ante el Tenerife. El filial amarillo logró además tres tantos en Gijón, lo que supone el 20% de los 15 que llevan en total a domicilio este curso. Y consiguieron además esa machada en un partido al que llegaron con numerosas bajas. El Sporting, como otros aspirantes, pinchó esta jornada. Pero lo hizo con el mayor sonrojo de todos, cuando todo estaba más de cara.

Otro 3-0, como en Zaragoza, iguala el peor pinchazo

Por segunda vez este curso, el Sporting cayó por un 3-0 en contra. Son las dos derrotas más abultadas de la temporada. La otra ocasión que se produjo fue en Zaragoza, por 3-0, en la jornada 25.ª de Liga, y como ahora tras enlazar por primera vez dos derrotas. Es cierto que aquella abultada derrota llegó marcada más por errores propios que aciertos del rival. Los regalos entregaron el partido al Zaragoza, algo a lo que ahora no se puede agarrar el Sporting como argumento. De aquella se sobrepuso el equipo con un triunfo en el derbi. De la segunda vez que se enlazaron dos pinchazos, ante Amorebieta y Racing, el pasado mes, el Sporting salió con dos victorias, que le volvieron a meter en el play-off. Pero ahora el margen ya es muy escaso, y la reacción al varapalo de perder con el colista debería llegar en un escenario de altura: en Cornellá ante el Espanyol.

El Molinón pierde fuerza en la segunda vuelta: de invicto a caer tres veces

Las dos primeras del partido fueron para el Sporting. Gaspar se vio solo en la frontal, se giró, pero le pegó sin fuerza con la izquierda. Mario González, poco después, se encontró una acción en un desmarque para encarar, pero definió sin precisión y flojo, sin poder esquivar al portero. Dos síntomas de que no era el día, de que faltaba algo. Y ese temor de dejar de nuevo escapar puntos en El Molinón se confirmó. En la primera vuelta el Sporting acabó invicto en su feudo, con seis victorias y cuatro empates, con 22 puntos sobre 30 posibles. En el segundo tramo de Liga, con nueve partidos jugados, los números han bajado hasta cuatro victorias, dos empates y tres derrotas, es decir, 14 puntos sobre 27, apenas la mitad, por el casi 75% de los puntos del primer tramo de competición. Por delante quedan ahora tres partidos fuera y dos en casa. Tocará dar la mejor versión en ambos registros.

Ramírez, con toda la artillería de mano, pero sin físico

Esta vez no hubo experimentos. Miguel Ángel Ramírez tiró para diseñar el once inicial de lo que tenía, con cuatro cambios. De vuelta al 4-4-2, con Roque Mesa por Róber Pier en el centro del campo, Guille Rosas por Pascanu en el lateral derecho, Cote por Pablo García en el izquierdo, y Queipo por Diego Sánchez para quitar un defensa y poner un jugador más de banda. Con bajas por lesiones y sanciones, el Sporting estuvo muy espeso, sin frescura, con una sensación de que el fondo físico no le da ahora que llega lo más importante.

Alejandro Irarragorri vive en directo el mal sabor de su primera derrota en casa

Con Alejandro Irarragorri en el palco aparecía una especie de talismán que hacía que el Sporting no conociese la derrota. Esta temporada la buena suerte del patrón se rompió a domicilio, en Santander, donde el dueño del Sporting había salido a saludar a la Mareona y gozó de un baño de masas en la previa. En El Molinón, Irarragorri se mantenía invicto. Y vivió el sabor amargo de la derrota en la peor situación posible, con un severo correctivo. En una semana en la que el presidente disfrutó de la fiesta de la reinauguración de Mareo, luciendo la nueva cara de la escuela de fútbol, el cierre llegó con una goleada ante el colista. Y se suma a algún dardo público lanzado contra el entrenador. Irarragorri cuestionó el planteamiento de Elche y Ramírez respondió aludiendo a su conocimiento futbolístico. Al final fue el Villarreal B de Miguel Álvarez el que dio la clase magistral.

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