Un millar de policías y mossos han desarticulado la mayor mafia armenia en España, con la detención de 142 miembros, seis de ellos jefes o "ladrones de ley". Se les atribuye tráfico de drogas y armas, blanqueo, contrabando de tabaco, soborno, corrupción en apuestas deportivas y robos. Hubo 73 registros en Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante, Albacete, Elche y Cartagena, aunque tienen ramificaciones en otros países. La investigación se inició por el doble crimen en Tarrasa tras el asesinato de dos miembros de la organización criminal el 4 de enero de 2016.