Un trabajador de 35 años vecino de Moreda de Aller resultó ayer herido de gravedad mientras realizaba labores en la planta de tratamiento de escorias en la factoría de ArcelorMittal en Veriña, Gijón. El hombre, que responde a las iniciales F. J. F. F., sufrió la amputación de un brazo mientras trabajaba con una cribadora móvil y fue trasladado rápidamente hasta el Hospital de Jove. Tras una intervención de urgencia fue derivado en ambulancia y en estado grave hasta el HUCA. Se trata del tercer accidente laboral relevante -dos de ellos mortales- ocurrido en Gijón desde el pasado 29 de enero, cuando murió un electricista en el estadio de El Molinón.

El siniestro tuvo lugar poco después de las diez de la mañana por causas que están investigando los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil. También realizan sus propias indagaciones responsables de Inspección de Trabajo para esclarecer lo ocurrido y comprobar las medidas de seguridad existentes en las labores que realizaba el trabajador. El afectado se encontraba trabajando para la firma Desarrollo de Operaciones Metalúrgicas (Dometal), una empresa auxiliar que trabaja en la planta de tratamiento de escorias en la factoría gijonesa, según confirman desde ArcelorMittal. Desde Dometal han preferido guardar silencio sobre este accidente laboral.

El trabajador afectado, que también sufrió daños en una oreja tras quedársele atrapado el brazo, fue trasladado en coche hasta el Hospital de Jove para ser intervenido de urgencia. Una vez estabilizado, y dada la gravedad de sus heridas -el afectado ha perdido la extremidad-, fue trasladado en ambulancia hasta el HUCA, donde permanece ingresado en la UCI con politraumas. Allí seguirá recuperándose de este grave incidente, para el que se han abierto diligencias judiciales a fin de esclarecer lo ocurrido.

El accidente laboral sufrido por F. J. F. F. es el tercero de gravedad que tiene lugar en Gijón en menos de un mes, desde que el pasado 29 de enero falleciese Ángel César González Santos, el electricista avilesino de 57 años que se precipitó desde el tejado del estadio de El Molinón mientras realizaba labores de iluminación en el campo del Real Sporting. Poco después, el 2 de febrero, fallecía José Antonio Sesmilo González, de 56 años, mientras trabajaba en labores de carga de carbón en el muelle Olano del puerto de El Musel.