La Guardia Civil de Pontevedra busca al autor de un peculiar atraco a una sucursal bancaria de la que consiguió llevarse un botín todavía por cuantificar sin decir ni una sola palabra. En la entidad solo estaba una cajera cuando irrumpió un hombre cubierto con un plumífero y con la cara tapada. Echó una bolsa sobre el mostrador y solo haciendo gestos le indicó a la cajera intimidándola que echase dinero dentro de la bolsa. Luego huyó.