Se puede decir que este ejemplo que da pie al presente artículo es sólo la gota que colma el vaso, chocante y peregrino porque el objeto de la censura se relaciona con el cómic histórico del insigne dibujante Francisco Ibáñez.
Todos los medios de comunicación se hicieron eco a excepción tanto del Telediario 1 como la edición nocturna de la cadena pública de la presentación del último número de los célebres dibujos, donde aparece como personaje el ex-tesorero del partido en el Gobierno entre otros destacados políticos españoles en una ficción en la que se recurre a la TIA para recuperar el dinero que se había llevado del Partido Papilar. Según fuentes del Área Cultural de TVE la noticia fue censurada por los editores de los informativos de mayor audiencia.
Sin embargo los ejemplos de censura, manipulación de los medios públicos y los ataques o restricciones al derecho fundamental del artículo 20 de la Constitución y artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos -libertad de expresión- son múltiples y significativos; y por supuesto, como es lógico y habitual en esta sección, no lo digo yo y sin fundamento ni respaldo fehaciente.
Así Seis ONG internacionales -Access Info Europe (AIE), Comité para la Protección de Periodistas, Federación Europea de Periodistas (FEP y a la que pertenece la FeSP), Fundación Open Society (OSF), Instituto Internacional de la Prensa (IPI) y Reporteros sin Fronteras (RSF)- acaban de publicar el informe "El estado de la libertad de prensa en España 2015", en el que detallan la difícil situación de la libertad de prensa en España.
En dicho informe se demanda la necesidad para España de una mayor transparencia en la asignación de la publicidad oficial" y asegura que la legislación de transparencia aprobada "no cumple con los estándares internacionales" y que la regulación actual de la difamación en España "está muy por debajo de los estándares internacionales sobre libertad de expresión y protección de la reputación".
Por otra parte denuncia que muchos periodistas les expresaron su "frustración" por la "práctica extendida" de funcionarios del Gobierno español de celebrar ruedas de prensa sin preguntas. Las preguntas son un derecho de los periodistas que contribuye de forma indispensable a "reforzar la transparencia del Gobierno y a ejercer una cobertura informativa equilibrada y contrastada."
También reprocha la nueva ley de seguridad ciudadana que "no sólo atenta gravemente contra la libertad de información sino que puede conducir a la censura".
Asimismo la FEP contempla "serias preocupaciones" por la actual dirección de RTVE, "muy criticada tanto dentro de la Corporación como fuera de ella por decisiones que se han interpretado como limitaciones a la independencia editorial".
Por su parte, Access Info Europe expresa su escepticismo ante la nueva ley española de acceso a la información y considera que "no está a la altura de los estándares de transparencia más vanguardistas" y que resulta una "ley que nace vieja a pesar de haber sido redactada y aprobada en 2013".
De la misma forma el reparto de fondos públicos para publicidad institucional en los medios de comunicación también recibe críticas y llamada a la enmienda, ya que el informe destaca que el gasto "no se distribuye de acuerdo a cifras de circulación, número de lectores, o de acuerdo a ningún criterio claro". Y razona que una mayor transparencia en los criterios de asignación y en el desglose de las cuantías que recibe cada medio "sería necesaria para garantizar que las prácticas de censura indirecta no estén distorsionando la competencia justa e impidiendo una mayor libertad de prensa".
Quiero reseñar que el grado de democracia de un país depende de la valoración de la diversidad de opiniones, la libertad de expresión y el espíritu crítico de sus diversos medios de comunicación. Y la libertad de prensa no es tal sin el código ético y deontológico de los profesionales que la ejercen controlando, como cuarto pilar del sistema democrático, a los otros poderes del estado, los servicios públicos y la corrupción.
