La asturiana Alicia Rubio García (Oviedo, 9 de febrero de 2000) está viviendo su particular sueño americano. Sus buenas condiciones para el fútbol y los estudios le permitieron dar el salto el pasado agosto a la Universidad de Wingate (Carolina del Norte) para jugar en su equipo (Bulldogs) al tiempo que iniciaba la carrera de Fisioterapia. "Soy muy afortunada porque es una experiencia única. Practico el deporte que me gusta y conozco las costumbres de otro país al tiempo que adquiero un alto nivel de inglés", asegura.
Alicia Rubio empezó a jugar al fútbol con 11 años en el Oviedo Moderno. Tras pasar por todas las categorías del club, ahora Real Oviedo, debutó con el primer equipo con 15 años frente al Barcelona. Formó parte de la plantilla de Segunda División en la temporada 2016-17 y la pasada también jugó en dicha categoría en el Llanera. Gracias a su nivel futbolístico, además del académico, el pasado verano Alicia consiguió una beca que cubre una parte muy importante del coste que supone realizar los estudios en la Universidad de Wingate.
"El sistema universitario americano permite conciliar perfectamente el deporte con los estudios", explica Alicia Rubio, que lleva casi tres meses disfrutando de estas ventajas: "Gran parte de la vida universitaria en el campus gira en torno al deporte. El campus está muy bien organizado y tiene, al margen de las instalaciones deportivas, la zona de aulas, residencia de alumnos y salones para comidas. Mi Universidad tiene campos de hierba natural en perfecto estado, gimnasio y sala de tratamientos", añade.
Las condiciones son tan favorables que Alicia Rubio se siente casi como una profesional: "Todo son facilidades. Por ejemplo, a cada jugadora nos ponen en los partidos y los entrenamientos un dispositivo que mide los distintos parámetros, que después se descargan para ser analizados. Además, todas las mañanas tenemos que subir a nuestra página web datos sobre horas de sueño, peso y marcar, en una figura humana, la parte del cuerpo en que sentimos dolor y su intensidad, para que los servicios médicos inicien el tratamiento adecuado".
Alicia Rubio es la primera futbolista extranjera de la historia de Wingate y está encantada del recibimiento: "El día que llegué, mis compañeras y los técnicos me estaban esperando en el vestuario para darme la bienvenida con la bandera de España. Después me acompañaron a hacer las compras necesarias para instalarme y al apartamento que comparto con dos compañeras". Además, en lo deportivo todo va sobre ruedas: "Los entrenadores cuentan conmigo y participo en todos los partidos, en distintas posiciones, algo muy difícil porque somos 30 en la plantilla".
También apunta otras diferencias con lo que conoció en España: "La competición se concentra en el primer semestre del curso, por lo que a veces jugamos dos partidos por semana. Aquí se hace un fútbol que, sin despreciar los aspectos técnico y táctico, destaca por el físico, ya que los campos son muy grandes y las jugadoras tienen una gran fortaleza". Alicia apunta que "todos los partidos se televisan, bien a través de una plataforma de la Universidad o por el canal de deportes ESPN 3, que tiene un convenio con Wingate".
