Donde ya resultan insoportables todos los impuestos que soportamos, nos siguen apretando y los ciudadanos estamos al límite de la asfixia. Los recaudadores son insaciables y nos lanzan un globo sonda -preludio de lo que vendrá- con una subida estratosférica del agua. Y no crean que se andan con pijaes, no, nada menos que un 50%, en principio, para luego hacerlo hasta el cien.
A la luz le acaban de dar otro "retoque" del 12%, y vayan sumando ustedes los impuestos y la fiscalidad con la que nos agobian: las citadas agua y luz, basuras, alcantarillado y limpieza, IBI e IRPF, copago sanitario, transportes varios, viñeta, impuesto de sucesiones? y en general en todo lo que a diario nos vemos obligados a consumir, sin que los sueldos o las pensiones crezcan acorde con el sablazo impositivo, con lo cual están hundiendo literalmente a los asturianos. La situación se agrava con el detrimento de los servicios que recibimos, que no son acordes con los impuestos. Van a las soluciones fáciles.
Cierto es que existe un amplio grupo de ciudadanos que viven felices y despreocupados a cuenta del resto, que somos nosotros. Son los que están en el "todo incluido", que son multitud, y que no han doblado el lomo en su vida y no tienen pensado en hacerlo. Para qué. Cada poco incido en ello, pero como si cantara.
Además Hacienda, ésa que dice que somos todos, ¡que ironía, señor!, nos llama a filas de nuevo y que no se te pase por la cabeza intentar escaquear un simple euro en la declaración de la renta, pues te empalen sin más.
Luego dicen que los españoles somos un país que vive en permanente estado de cabreo, lógico, sumen a lo citado lo particular de cada cual y el coctel no puede ser más explosivo, ¿eh? Recuerden que tienen ahí las elecciones...
