Sinde apunta a Bollaín para la Academia de Cine y da carpetazo al ciclo de De la Iglesia

Oviedo / Madrid,

J. B. / Agencias

Álex de la Iglesia utilizó su cuenta en la red social Twitter, pero tanto quería precisar que le quedaron cortos los habituales 140 caracteres y utilizó una aplicación que permite ampliar los mensajes. Y ahí explicó su salida de la Academia y su desacuerdo con la ley antidescargas, ya más conocida como «ley Sinde». «Al parecer no todo el mundo ha entendido las razones por las que dimito. Creía que estaban claras en mi carta y mis declaraciones en Twitter», y añade: «Las expongo aquí. Comencé un diálogo con las partes afectadas (...). Busqué propuestas y se me ofrecieron, y lo hice llegar al Gobierno y a la oposición, como era mi deber (...). Hay gente en la Academia y en el sector cinematográfico que está de acuerdo conmigo, y otros, obviamente, no (...). A partir de ahora hablaré como director de cine, y será mejor para todos. Sin embargo no quiero abandonar el trabajo comenzado, y dar la impresión de dejar el puesto sin hacerme responsable de ello (...). Mañana me reúno con la junta directiva de la Academia para valorar la situación».

Y ya en declaraciones a la agencia «Efe» precisa: «Yo voy a dimitir. Se replantearán otras cosas, si dimito el 13 de febrero o en otro momento», con el fin de esperar a que se celebra la gala de los «Goya».

El presidente de la Academia es el centro de atención tras reanimar el Senado la ley antidescargas por acuerdo del PP y el PSOE. Pero el cine sigue siendo el centro de la polémica, ya que la ministra, Ángeles González-Sinde, dijo ayer que la actual vicepresidenta, Iciar Bollaín, sería una buena sustituta. Concretamente, la Ministra dijo que es normal que (De la Iglesia) lo deje si no puede seguir ejerciendo un papel institucional, a la vez que apuntó que «Bollaín podría sucederle».

Los políticos también reaccionaron ante la salida de De la Iglesia. Así, la secretaria del PP, María Dolores de Cospedal, dijo que lo «lamentaba», y añadió que ya habrían llegado a una acuerdo con anterioridad sobre la ley si el Gobierno hubiera estado dispuesto.

Por otro lado, siguen las reacciones de los autores. Ayer lo hizo todo un símbolo de la música española: Serrat, quien tiró de ejemplo: «yo he pasado por delante de una charcutería, he agarrado un chorizo y me lo he llevado, de forma que el charcutero me ha dicho "oiga, que hay que pagarlo", yo le he contestado: pues usted perdone, ¿qué le debo?». Y ha añadido: «Me parece que con los artistas tendría que pasar lo mismo, y no sé por qué se producen situaciones tan confusas y difusas sobre la propiedad intelectual; lo ignoro, pero yo, hasta la fecha, tengo que pagar por todo lo que uso y consumo», declaró a «Efe».