Susana Molina, una de las influencers más populares en estos momentos en España, reconoce que perdió varios años de su vida por no asumir que tenía un problema e ir a terapia. A la excocursante de la Isla de las Tentaciones y Gran Hermano no le importante reconocer que tiene ansiedad aunque le costó identificarla y ahora trata de ponerle remedio y recuperar el tiempo perdido.

Todo empezó cuando salió de Gran Hermano, el reality que le dio la fama. Salió de allí siendo muy querida entre la gente joven y con nuevo novio: uno de los concursantes, el gemelo Gonzalo Montoya. Se dejaron diez años después en televisión, mientras participaban en La Isla de las Tentaciones. Pero por el medio pasaron muchas cosas en la vida de Susana Bicho, como se le conoce en redes sociales. Salió de Gran Hermano y no quería salir a la calle. Tampoco iba a las discotecas de moda que frecuentaban sus compañeros de concurso. Después, vinieron ataques de pánico y ansiedad tras desmayarse en público. Se obsesionó con la idea de que le volvería a pasar, tal como le contó al influencer Luc Loren en el programa destinado a hablar de la salud mental que emite por Youtube.

"Perdí dos años de mi vida, muchas cosas, por no haber ido a un psicólogo el día dos que comenzó a pasarme esto. No podía coger el coche, cuando yo siempre viajaba y hacía diez horas en coche y me encantaba. Iba a cero conciertos, tenía que esperar a que estuviera alguien en casa para ducharme...", cuenta.

En la actualidad dice sentirse bien y reconoce que la pandemia le ha ayudado a estar más consigo misma y entenderse mejor. "Me hubiese encantado que alguien de mi entorno me hubiese dicho: 'Vamos a terapia'", concluye.