Obligan a parar el rodaje de La Isla de las Tentaciones: Sandra Barneda, a punto de "caer redonda"

El ocio del pueblo tiene sus consecuencias en los causantes de su entretenimiento. El formato reality llegó a España para quedarse y, desde entonces, miles de telespectadores atienden cada movimiento de sus protagonistas. Escogen a sus favoritos, estallan cuando estos pierden, gritan ante las injusticias, votan para salvarlos y, finalmente, apagan el televisor cuando su periplo por el formato ha terminado.

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De los clásicos que desembarcaron en el Mediaset español, como Gran Hermano, se crearon nuevas versiones que en esencia eran iguales, pero que ofrecían variantes en cuanto a sus participantes. Del concepto de reality constituido por personas anónimas nació La Isla de las Tentaciones. Este programa rodado en una isla paradisíaca con villas de escándalo también contuvo en su "elenco" a personajes reconocidos que incluso prendieron la primera llama de su amor en otros concursos.

Lo que muchos de ellos saben, pero desconocen hasta qué punto, es que los buenos momentos no salen a cuenta frente al sufrimiento de la experiencia. Sandra Barneda lleva acompañando a los participantes de La Isla de las Tentaciones desde la segunda edición del reality y ya ha visto de todo. La presentadora ha visto de todo, ha sufrido con las infidelidades y ha derramado lágrimas de emoción cuando el amor triunfa de manera extraordinaria en la última hoguera encendida.

Un rodaje imposible

Ahora, Barneda ha comenzado a subir contenido de manera bastante frecuente en su cuenta de Tiktok y comparte alguna que otra. Aunque parezca mentira, la presentadora ha revelado que uno de los momentos más bonitos que vive en el programa es a la par uno de los más complicados: el desembarco. "Es el momento en el que voy a conocer a las parejas y es un día de grabación muy largo, grabamos muchas horas expuestos al sol... La grabación es muy dura", comienza explicando Sandra Barneda.

Para aquel que no lo sepa, para llegar a la isla en la que se lleva a cabo la grabación necesitan hacerlo por medios marítimos, así que los participantes se suben a un catamarán en el que Sandra ha vivido momentos angustiosos: "Se han mareado de la leche algunos y hemos tenido que parar". El desembarco también es complicado para Barneda, que en ocasiones ha estado a punto de "caer redonda".

Además, la presentadora ha abierto el melón de los planos espectaculares. Algo tan sencillo como el saludo desde el barco requiere de muchas tomas: adelante, atrás, de costado y perfil... Hay que tener en cuenta también que gran parte del rodaje se hace a plena luz del día, con el calor brillando en lo más alto. Es más, sus tomas caminando por la playa son bastante dolorosas: "Me puedo hasta hacer ampollas porque arde. Además tienes que simular y caminar muy bien... Luego paramos y me traen corriendo las zapatillas".