En San Lorenzo las futuras promociones de vigilantes de playas y piscinas tienen una cita anual, veraniega, de exhibición y esfuerzo. La de hace unos días fue la sexta edición de la "Lifeguard Race Series", un evento organizado por el Club de Salvamento y Socorrismo Gijón con el que se logra que deportistas del club convivan y compitan contra jóvenes de otras cuatro entidades invitadas. En esta ocasión los participantes, además del Club Gijón, fueron del Club Salvamento SAPO (Pontevedra), Club Playa Dorada de Noja (Cantabria), CN SOS Betera (Valencia), y el SVAT Tarancón (Cuenca). Y con la particularidad de que los visitantes vienen a Gijón becados por el club local.

Basilio Martínez, presidente de Salvamento y Socorrismo Gijón cuenta que el objetivo de sufragar los gastos a los 25 participantes "foriatos" es lo que les permite "estar aquí dos días concentrados y compartir experiencias" con los deportistas gijoneses. Los fondos para ese gasto salen de "unas becas que tiene nuestro club con el trabajo de todo el año, así como con los patrocinadores e instituciones".

El "Lifeguard Race Series" surgió con el claro objetivo de mostrar que el socorrismo y el salvamento también son un deporte. "Costaba mucho desvincular en Asturias el salvamento y socorrismo de las personas adultas, así que para que la gente viese que es un deporte pensamos que si empezábamos haciendo una concentración con los cadetes -jóvenes de 13 y 14 años- la gente podía separarlo y visualizarlo mejor", explica Martínez.

La cita se realiza después del Campeonato de España, y en ella se invita a los equipos a participar con dos cadetes masculinos y femeninos, acompañados de un técnico. Además, estos jóvenes no son los únicos que pueden participar, ya que la exhibición acoge las categorías junior, juvenil, absoluto y máster, algo que, tal como explica Martínez, permitió que en esta sexta edición se encontrasen, del total de 80 socorristas, dos participantes de 43 años. Todos lucharon con las condiciones "más duras de todas las ediciones porque entró mar el viernes y el sábado nos quedó un espacio de un metro en la playa", comenta Martínez.

Tras dos días de entrenamientos, la última jornada mostró las habilidades de cada participante, permitiendo que bañistas y paseantes pudieran ver a los competidores de todas las edades en acción. Ayudados por la pleamar, el evento contó con una "afluencia máxima" de espectadores. "El paseo estaba lleno, y el Muro hace un anfiteatro perfecto. Los bañistas se paraban en la zona de competición para vernos", matiza Martínez. Los visitantes del Club SAPO se llevaron la mayoría de los trofeos.

La labor del club gijonés, el único que desarrolla el deporte base de salvamento y socorrismo en la comunidad, no se queda únicamente en la organización del "Lifeguard Race Series", sino que a lo largo del año realizan diversas funciones. El curso pasado colaboraron con 19 colegios con actividades extraescolares que llegaron 210 alumnos. Jóvenes que disfrutaron de este deporte en diversas piscinas, de los cuales 40 de ellos también lo compaginaron con actividades en la playa. Celia Fernández, de 13 años, alumna del colegio San Miguel, es una de las gijonesas que gracias al Club Gijón descubrió el salvamento y socorrismo como deporte. Afirma que tuvo que superar "muchas agujetas" del esfuerzo que implica, pero se queda con la buena experiencia de "aprender a superar dificultades en el agua, saber cómo tienes que ayudar a alguien que está en apuros y con el deporte que te obliga a hacer". Un deporte que saca músculo.