Huevos en agua fría: la forma de cocinarlos que cada vez copia más gente (y con razón)

Deja de cometer este error tan común

Huevos en agua fría: la forma de cocinarlos que cada vez copia más gente (y con razón)

Huevos en agua fría: la forma de cocinarlos que cada vez copia más gente (y con razón)

Los huevos son uno de los ingredientes más utilizados en la cocina, ya se consuman solos o incorporados a diversos platos. Aunque el huevo de gallina es el más común, también se pueden degustar otras variedades de huevos de ave, como los de codorniz, pato, oca y avestruz. Los huevos de pescado, como el caviar, los huevos de gallina y los de lumpo, también son apreciados por su riqueza nutricional en aminoácidos, proteínas completas, así como en varias vitaminas y minerales; además, los huevos son una de las pocas fuentes de vitamina D de nuestra dieta.

Hay muchas formas de cocinar este alimento, pero de los diversos métodos, la cocción de huevos cocidos sigue siendo la más sencilla. Aunque esta preparación es elemental, no siempre sale según lo previsto. Por eso compartimos algunos consejos sencillos para garantizar que los huevos cocidos se cocinen a la perfección.

  • Para empezar, se colocan los huevos en un recipiente con agua fría, llenándolo hasta que queden completamente sumergidos. Es fundamental que el cazo sea lo suficientemente grande para que quepan los huevos y el agua.
  • A continuación, ponga el cazo a fuego fuerte hasta que el agua alcance el punto de ebullición. Puede añadir una pizca de sal o una cucharadita de vinagre durante la cocción para evitar que se agrieten y facilitar el pelado.
  • En cuanto el agua hierva, apague el fuego y deje reposar unos diez minutos. En ese momento, saque los huevos del agua y enjuáguelos con agua fría para detener el proceso de cocción.
  • Una vez fríos, se pelan suavemente los huevos, dejando al descubierto una cáscara intacta, lista para ser consumida sin miedo. No hay ningún riesgo en dejarlos en el agua durante más tiempo, lo que garantiza una cocción perfecta de los huevos, sin sorpresas desagradables.
  • El golpe de cucharaHay otros métodos ideales para cocer bien los huevos. Para empezar es importante sacar los huevos de la nevera con bastante antelación. Mientras tanto, ponemos abundante agua a hervir. Una vez que rompa a hervir, sumergimos los huevos muy suavemente con una cuchara. El cambio de temperatura y unos pequeños golpes podrían romper la cáscara. Llegados a este punto, sólo nos queda esperar 8 minutos y escurrir y enfriar los huevos.Si preferimos una textura diferente para nuestros huevos, basta con ajustar el tiempo de cocción. Por ejemplo, para obtener huevos "barzotte", debemos procurar que la yema quede más blanda y no se cueza del todo. Para ello, podemos utilizar uno de los dos métodos descritos anteriormente, contando 5 minutos después de la ebullición. Si, por el contrario, queremos que el huevo quede blando y con la yema sin cocer, sólo tenemos que esperar 1 minuto tras la ebullición. ¡Tendremos entonces un delicioso huevo pasado por agua!

El golpe de cuchara