Secar las prendas a la sombra: este es el efecto que causará en tu ropa si les da el sol

Toda prenda de ropa necesita de un buen cuidado para poder conservarlas todo el tiempo posible. Si bien es cierto que los tejidos más comunes que forman parte de nuestro armario suelen tener una vida bastante más corta que las prendas de calidad que usamos en ocasiones más especiales, lo cierto es que sí que tenemos en nuestra mano darles un tratamiento suficiente como para prolongar su vida un poco más.

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El lavado correcto de cada tipo de prenda lo es todo. Es importante partir del hecho de que también influirá en nuestras prendas su tonalidad; no será lo mismo echar a lavar ropa de color que más oscura. Por eso, uno de los consejos de los que hay que partir es del hecho de que, a la hora de llenar el tambor, apuestes por uno u otro tipo.

Esta división tiene varios motivos: en primer lugar, porque si mezclas una prenda de color llamativo con otra blanca, lo más seguro es que termine perdiendo algo de color y fastidie a la otra. Aunque la ropa negra parezca más inofensiva, también puede terminar soltando restos del tinte. Lo mejor será que te asegures hagas una división para conseguir sacar el máximo partido a cada una por separado. Eso sí, tiene sus peros: si esos colores son de tonalidad oscura como el marrón o el gris, no habrá ningún tipo de problema.

Centrémonos en la ropa de color negro. Precisamente por este riesgo a que se destiñan, lo mejor será lavarlas con agua fría con una temperatura a 30 grados centígrados como máximo. Ten en cuenta que una inmensa mayoría de las lavadoras cuentan con un programa determinado para prendas oscuras, así que no será motivo de preocupación. De todas formas, lo mejor es que nos ahorremos todos los disgustos posibles. Antes de ponerte la prenda por primera vez, échalas a un barreño lleno de agua con un buen puñado de sal y déjalas reposar para qe los pigmentos de coor se adhieran mejor a la prenda.

Lejos del sol

Llega el momento del secado. Normalente buscamos ahorrarnos todo el tiempo posible en este proceso, sobre todo si necesitamos tener una prenda lista cuanto antes. En invierno, los tiempos de secado se multiplican, así que tus procesos de colada se alargarán mucho más.

Sin embargo, exponerlas directamente al sol, más que un favor podrá actuar en tu contra. La respuesta al porqué de esta pregunta es muy sencilla: los rayos directos podrían provocar que se decolorara mucho antes. Por lo tanto, lo más recomendable es que tiendas tu ropa al aire libre, pero asegurándote de que le da la sombra y de que las corrientes de aire sigan circulando.

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Por eso, quizás trasladar el tendedero dentro de casa durante los meses de lluvia no sea tan mala idea. En estos casos, debes hacer un uso más inteligente de los atajos para conseguir que la ropa se seque lo antes posible sin contar con el calor exterior del verano. Por eso, asegúrate de tender bien cada prenda, darle su espacio en el tendedero y sacudirla para eliminar toda la humedad posible.

¿Qué pasa con las prendas blancas?

El proceso de secado de las prendas blancas es totalmente diferente. Estas no corren peligro de perder color, así que es incluso recomendable que les de el sol para eliminar más fácilmente alguna que otra mancha que se ha quedado impregnada.