Este sencillo método produce toallas aún más suaves y limpias

Este sencillo método produce toallas aún más suaves y limpias

Este sencillo método produce toallas aún más suaves y limpias

Este sencillo método produce toallas aún más suaves y limpias

Uno de los mayores placeres de una estancia en un hotel es disfrutar de la suavidad de las toallas. Sin embargo, puede ser difícil conseguir el mismo resultado en casa si no se toman ciertas precauciones.

La cal del agua se deposita en las fibras del tejido y las vuelve cada vez más ásperas a medida que lavamos las toallas. El tejido se vuelve rígido y el suavizante ya no parece funcionar.

Si quieres toallas supersuaves, es importante seguir un pequeño proceso que será crucial para la vida de las prendas: por ejemplo, sólo deben aclararse con agua fría.

Eliminar el suavizante. Años y años de marketing nos han hecho creer que el suavizante es la solución a todos los problemas. Por el contrario, los productos químicos de los suavizantes industriales acaban fijándose a las fibras de los tejidos, con los resultados contrarios a largo plazo.

Lava las toallas por separado. Para evitar que los tejidos de las toallas absorban las bacterias de la suciedad de otras prendas, lávelas por separado a temperaturas medias-altas (entre 40 y 60 grados centígrados).

La fórmula mágica. Este sencillo método produce toallas aún más suaves y limpias. La fórmula mágica se divide en dos pasos diferentes.

Añadir bicarbonato sódico al cajón de la ropa sucia de la lavadora. Esto ayuda a atacar la suciedad, blanquear el tejido y combatir los malos olores. Añade un poco de vinagre al cajón del suavizante hasta que esté completamente lleno. El vinagre da a las toallas un olor muy agradable, las desinfecta y las hace aún más suaves.

Por último, si vives en una zona donde el agua tiene mucha cal, prueba a comprar un detergente antical.

Cáscaras de huevos en la lavadora

Seguro que alguna vez has oído decir que lo más importante es lo que hay dentro de la cáscara. Sin duda es lo que mejor sabe, pero vamos a contarte los beneficios de las cáscaras de huevo y algunas formas de utilizarlas.

Las cáscaras de huevo contienen más de un 90% de calcio, además de otros componentes como magnesio, zinc y hierro, entre otros.

Por eso te recomendamos que las utilices después de haber eliminado las bacterias que puedan contener, por ejemplo hirviendo una cierta cantidad de cáscaras en agua durante 5 minutos, dejándolas secar sobre un paño y metiéndolas en el horno (180º) durante 10 minutos, lo que facilitará el proceso de trituración.

No todo el mundo lo sabe, pero las cáscaras de huevo son muy útiles para blanquear la ropa. Lo primero que hay que hacer, sin embargo, es esterilizarlas introduciéndolas en calcetines viejos, de nailon por ejemplo, y sumergiéndolas después en un recipiente con agua caliente. De este modo, ya estarán esterilizados y podrán colocarse en el cesto de la lavadora con la ropa blanca. No lo sabías, pero es una auténtica ventaja para tu colada.