Quitar una punta de la esponja, la solución que deja tus platos impecables

Este truco ultrasencillo para las esponjas lavavajillas te ayudará a conservarlas durante mucho más tiempo

Quitar una punta de la esponja, la solución que deja tus platos impecables

Quitar una punta de la esponja, la solución que deja tus platos impecables

Cambiar de esponja cada semana no siempre es fácil. Aquí tienes un truco que te ayudará a conservarla durante más tiempo. Conservando su eficacia.

El truco que necesitas

Para mantener la vajilla limpia, es importante utilizar los productos de limpieza adecuados. Pero eso no siempre es suficiente. También es vital que tu esponja esté en buenas condiciones. Por eso es importante cambiarla con suficiente frecuencia. Sin embargo, muchos de nosotros seguimos utilizando las esponjas mucho más tiempo del necesario.

Los microbiólogos recomiendan cambiar la esponja cada semana. Al fin y al cabo, pueden acumular bacterias y microbios.

Cada vez que lavas los platos, la esponja acumula suciedad y restos de comida. Y se convierte en un auténtico nido de gérmenes. Que pueden contaminar la encimera y la vajilla.

Sin embargo, hay algunos trucos para evitar tener que cambiar la esponja cada semana. Algunas personas creen que hirviéndola o calentándola en el microondas se limpiará.

Sin embargo, esto no es tan eficaz. El 60% de las bacterias se eliminan. Pero eso no significa que la esponja esté estéril. Según un estudio reciente, las esponjas así limpiadas siguen llenas de bacterias.

Es aconsejable cambiar la esponja al menos una vez al mes. Aquí tienes un truco para reutilizar tus esponjas sucias.

Una nueva vida para tu esponja

Si tu esponja está demasiado sucia para limpiar los platos, eso no significa que haya que tirarla. De hecho, hay un truco que te permite reutilizarla para otra cosa.

Cuando tu esponja llegue al punto en que ya no puedas utilizarla, acuérdate de cortar una esquina. Así podrás identificarla y dejar de usarla para fregar. Pero puedes utilizarla para limpiar otras cosas. Como el cubo de la basura, el váter, los zapatos o las ruedas del coche.

Con este truco, podrás identificar fácilmente la esponja que ya no debes utilizar en la cocina. Cuando ya no sirva, podrás deshacerte de ella. A modo de recordatorio, las esponjas lavavajillas suelen estar fabricadas con materiales sintéticos. En concreto, poliuretano, un derivado del petróleo.

También pueden contener agentes antimicrobianos para limitar la proliferación de bacterias. Pero estas esponjas no son biodegradables. Así que pueden liberar microplásticos cuando se descomponen.

Por otra parte, su producción también tiene un impacto en el carbono. Razón de más para encontrar la manera de utilizarlas durante más tiempo. En lugar de tirarlas cada semana.

Hoy en día, hay muchas marcas en el mercado que prometen cientos de usos para su esponja. ¿Se trata de un truco de marketing o es realmente eficaz? Siempre hay que tener cuidado con lo que se usa.

Sobre todo cuando se trata de la vajilla. La higiene debe ser siempre una prioridad en la cocina. Los nidos de bacterias que se forman pueden ser peligrosos para la salud. Por ejemplo, pueden contaminar los alimentos que comes. O los tenedores, cuchillos y cucharas que utilizas para comer.+