El aluvión de famosos que saltó a la arena política en 2008 para apoyar a Barack Obama brilla por su ausencia en los próximos comicios legislativos. En 2008 el desfile de apoyo de artistas fue incesante: George Clooney, Tom Hanks, Halle Berry, Susan Sarandon, Samuel L. Jackson, Morgan Freeman, Robert De Niro o Edward Norton... Sin embargo, sí hay apoyos económicos, como los de Kiefer Sutherland, James Cameron, Melanie Griffith, Barbra Streisand, Steven Spielberg o Jamie Foxx. Y el cineasta Rob Reiner se ha encargado de elevar la temperatura del debate. Reiner, director de «Misery» dijo: «Temo que el (movimiento popular) Tea Party consiga un líder carismático. Porque venden miedo y angustia. Y es lo que vendía Hitler».