Fortuny llegó a Venecia y se volvió loco con las luces de la Laguna. A Marcos Luengo le pasó algo parecido cuando hace unos meses entró en La Moncloa y descubrió en el despacho de Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno Pedro Sánchez, un cuadro del pintor postimpresionista Joaquín Mir, conocido como el "Van Gogh español". La combinación de colores, una amalgama de rosas, violetas y naranjas, sirvió al diseñador moscón para crear la colección otoño-invierno 2019/20, que presentará el lunes 28 de enero, a las cinco y media de la tarde, en el marco de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, la antigua Cibeles.
Son días de trasiego en el taller ovetense de Luengo, donde además de atender los encargos habituales se rematan con esmero unas prendas con un marcado sello "Luengo", que en esta ocasión no llevan nombre.
El público, y entre él seguro que muchas caras conocidas, podrá ver originalidades como unas alforjas anaranjadas, en piel de cabra, con láminas de metal; pero también pantalones rectos que combinan con cuerpos realizados en tejidos coloreados como los cuadros de Mir, impecablemente cortados y cosidos.
Confiesa Luengo que esta vez ha sido algo más duro ultimar el trabajo. La reciente pérdida de su madre, Elvira Azpiazu, que también pintaba, ha sido un duro golpe. Pero la vida sigue y Luengo ha sido capaz de declinar esa gama de rosas y violetas, de una forma sutil, como si los colores se deslizasen sumamente por las telas. "Nos hace ilusión desfilar en Madrid; pero todo esto no sería posible sin el apoyo tan importante que recibimos de nuestra clientela ovetense y asturiana". Lo dice mientras se acerca a una clienta que se prueba algo en la tienda y comprueba algunos detalles.
"Vestir a Begoña Gómez fue una gran experiencia; todo salió muy bien", señala el creador, que desde hace algún tiempo cuenta con atelier y tienda en el barrio de Salamanca. Luengo no para. Dentro de unas semanas participará en el sexto programa de "Maestros de la Costura", que presenta Raquel Sánchez Silva, otra de sus fans.
"Fíjate que lo de las alforjas ya lo adelanté yo en 2014, incluso hicimos riñoneras de visón". La piel también formará parte esta vez del reparto del desfile. Como aperitivo, el diseñador enseña un abrigo malva empolvado realizado con cordero de Mongolia, piel de cabra y lana cocida.
Los zapatos de la asturiana Patricia Riquelme calzarán a las modelos en un desfile con gran intensidad de colorido que promete sorpresas. Como aperitivo, Luengo aporta algunas claves: la superposición de prendas y unas mangas con un volumen especial en la parte inferior, difíciles de imitar.
