El diplomático colungués Jorge Hevia Sierra, elegido hace unos días presidente de la Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE), que agrupa al 70% de los miembros de la carrera en España, presentó ayer en la Escuela Diplomática de Madrid el libro “Muchas vidas y un destino: experiencias diplomáticas”, que ha coordinado con Enrique Criado, editado por Basilio Rodríguez Cañada y que contiene 20 relatos de otros tantos miembros del servicio exterior español acerca de momentos de especial relevancia en sus trayectorias. El propio Hevia protagoniza un capítulo sobre su tarea con españoles condenados por delitos de narcotráfico cuando fue cónsul en República Dominicana. Paloma Serra, otra diplomática asturiana actualmente destinada en Israel, también participa en el libro, que, a pesar de expresar la dureza que tiene a veces la vida de los diplomáticos, está realizado con humor y amor a la profesión en la que la palabra “destino” está siempre presente. Hevia lo sabe bien. Es director político adjunto del Ministerio de Exteriores, y anteriormente fue embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA), así como embajador en El Salvador y consejero Cultural en la Embajada de España en Italia.

“Un día nos reunimos tres compañeros en un almuerzo informal y hablamos sobre la posibilidad de hacer un libro para resaltar aspectos de nuestro trabajo que no eran tan conocidos como otros; en una Embajada también se viven situaciones duras”, señala Hevia, que en el acto de ayer, retransmitido por streaming, estuvo acompañado por su “jefa”, la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya. “Ha sido todo un detalle de la Ministra estar en la presentación, le estamos muy agradecidos”, aseguró Hevia, convencido de que, a pesar de los estereotipos sobre diplomáticos que aún circulan, la sociedad española valora el trabajo que hacen sus representantes en el extranjero. “Existen situaciones de tensión; también vivencias insólitas y experiencias enriquecedoras y particulares”, explica Hevia. “El trabajo de un diplomático sigue siendo lo que siempre ha sido: el objetivo es trabajar por las relaciones entre tu país y el de destino, y conseguir ampliar vínculos económicos, además de la defensa de los españoles que están en el extranjero”, relata Jorge Hevia, buen conocedor de la realidad de Estados Unidos, tras su estancia en Washington. “Joe Biden es un político profesional y tiene una tarea muy difícil”, indica.