Por su forma de vestir, de hablar, de moverse, dentro y fuera de la gran pantalla, Audrey Hepburn (1929-1993) se convirtió en uno de los iconos pop del siglo XX. Su imagen cándida, sus recogidos y sus vestidos han sido replicados hasta la saciedad. Muchas actrices y modelos se han postulado como sus herederas. Ariadna Grande, Natalie Portman, Audrey Tatoo o Alexa Chung y Anne Hathaway, Olivia Palermo, Jennifer Love Hewitt, Keira Knightly, Emily Ratajkowski, Penélope Cruz o Lily Collinsl, pero la que se ha llevado el gato al agua para encarnar a la leyenda de Hollywood ha sido Rooney Mara, que lleva una década fascinando al público por sus conmovedores papeles en “Millennium: los hombres que no amaban a las mujeres”, “Carol”, “Her” o “El callejón de las almas perdidas”, de próximo estreno en España. La dos veces nominada al Oscar, de 36 años y pareja desde 2016 de Joaquin Phoenix, con el que tiene un hijo de año y medio, ha sido llamada a reencarnar a Hepburn en el próximo biopic de Apple sobre la vida y carrera de la mítica actriz.
A tenor de cómo suele lucir en sus apariciones en la alfombra roja y en Instagram, al más fiel estilo Hepburn, con cejas pobladas y su figura esbelta y juvenil, poco trabajo de caracterización le va a dar Mara al equipo de peluquería y maquillaje.