Anabel Pantoja celebra el quinto premio de la Lotería: "Ya ha cantado"

La suerte parece sonreírle a Anabel Pantoja estos últimos años con la Lotería de Navidad. Es el segundo año consecutivo que el premio más esperado del año arranca las lágrimas de la sobrina de La Pantoja, que presume orgullosa en sus redes sociales.

La reacción de Anabel Pantoja a la polémica entrevista de Fran Rivera

Arrancaba la mañana levantándose bien temprano Anabel para disfrutar del Sorteo Extraordinario, como ya es costumbre para ella. La influencer pasaba de la cama al sofá, acompañada de todos sus boletos dispuestos sobre la mesa y un café para espabilarse y no perder ni un solo detalle de lo que pasaría de un momento a otro: "Suerte para todos -ojalá para quienes más lo neecsitan-". Dicho y hecho, la influencer compartía su ilusión entre lágrimas derramadas tras ser espectadora, otro año más, de cómo "su niño" destapaba uno de los grandes premios.

No se trataba de su sobrino, ni del hijo de ninguna amiga. Con "su niño" se refería ni más ni menos que a uno de los estudiantes del colegio de San Ildefonso con el que no tenía ningún tipo de relación pero que, sin embargo, se ganó su corazón en la edición pasada.

Unas fechas sensibles para Anabel

"¡Ole, mis niñas!", gritaba la sobrina de La Pantoja. Con los nervios a flor de piel y las lágrimas contenidas, Anabel Pantoja acariciaba la pantalla cuando le tocaba el turno al pequeño que le había conquistado el corazón. "¡Pero si este es el niño del año pasado! El que dio El Gordo!". Justo antes, Anabel había compartido una historia del año pasado en el que, deshecha en lágrimas, celebraba que él mismo hubiera cantado El Gordo: "Estoy como si me hubiera tocado a mí. Mis niños, sabía que lo iban a dar ellos. Qué lástima".

Cuando anunció su primer premio, su ilusión creció aún más: "¡Es el niño del año pasado! ¡Qué ilusión! El que dio El Gordo, que llevaba la pajarita roja!". Tal era su emoción que se acercó a la pantalla para enfocarle muy alegre: "Dije que este niño tenía magia. Aquí lo tenéis. ¡Un quinto premio!".

Anabel Pantoja ha pasado una mañana llena de lágrimas: "Después dicen que soy muy exagerada, pero ya ha salido un Gordo". No obstante, esta vez no disfrutó del programa completo porque tenía que ir a revisar cómo iba la obra de su nueva casa. Por su parte, la suerte le sonrió con 100 euros, así que "ya se daba por válida".

Para la sobrina de La Pantoja no hacen falta premios en metálico; a ella hace ya un tiempo que le había tocado la Lotería con su isla, Gran Canaria. "Soy millonaria", comentaba mientras bebía una cerveza en el puerto con vistas al mar.

Fue un día de lo más sensible para la sobrina de La Pantoja, que también sufrió con la despedida de Pedro Piqueras: "Mis hijos sabrán quién es".