Cincuenta y siete días después de haberse perdido la pista a Sandra Bermejo García, la psicóloga madrileña de 32 años afincada en Gijón desde 2020, la ciencia arroja la primera luz sobre una desaparición harto enigmática que tenía a toda España en vilo. El cadáver en avanzado estado de descomposición hallado en el Cabo Peñas el pasado 23 de diciembre es finalmente el de la mujer a la que buscaban infatigablemente su familia y la asociación SOS Desaparecidos desde el pasado 8 de noviembre. La Brigada de Policía Científica de la Comisaría Provincial de La Coruña ha confirmado que los vestigios recibidos en su laboratorio territorial de biología, correspondientes al cadáver de la mujer hallada en el Cabo Peñas, resultan compatibles con el perfil genético obtenido de muestras indubitadas de la desaparecida. Una duda de las muchas de este enigma queda despejada: Sandra Bermejo García ya no está viva.

La primera reacción de los familiares de la psicóloga, según contó a este periódico el presidente de SOS Desaparecidos, Joaquín Amills, fue de conmoción: "La noticia les cayó como un jarro de agua fría porque los sucesivos mensajes alentadores que habían recibido, especialmente de la Policía, sobre la no coincidencia de los restos humanos hallados en Peñas con Sandra les hicieron concebir esperanzas de que seguía viva".