Tras iniciarse ayer la obra para suprimir el "cascayu" en el Muro, con las primeras labores de picado de asfalto para instalar semáforos, a lo largo de esta mañana se ha terminado de retirar el mobiliario público a lo largo de todo el paseo. Los bancos se habían colocado para dar una mayor sensación de peatonalización y ayer, por ejemplo, muchos de ellos estaban ocupados a media tarde. Hay 30 bancos dispuestos por todo “el cascayu” desde los que hay frente al número 30 de la calle Ezcurdia hasta la rotonda de la avenida de Castilla. Están todos agrupados en lotes de a tres, con uno para más de un usuario y dos individuales. Por último, las papeleras a retirar por los operarios serán ocho, y la mayoría de ellas están junto a los pasos de cebra. Quitando esto y añadiendo semáforos –ayer ya había marcas en el suelo que indicaban su posición– los coches volverán a pasar por encima de la pintura del “cascayu”, que se mantendrá intacta.