Terror, esa es la palabra que describe lo vivido en Ribera de Arriba en la noche de este lunes. Numerosos vecinos de la localidad fueron testigos de como un hombre sembró el terror en en la rotonda de Soto de Rey después de haberle cortado la cabeza a su padre, llegando a arrojarla contra los vehículos que circulaban por esa vía, mientras no paraba de reír.

"Se ha lanzado literalmente sobre el coche", dijo uno de los conductores, aún aterrado. Otra testigo fue más explícita: "Se puso delante de mí y me tiró la cabeza. Venía con la cabeza en la mano y además riéndose. Cuando pasé, me volví y le vi jugando como al balón con la cabeza. Debió tirársele encima a más gente. Algún coche pasó luego con la luna reventada", aseguró la testigo Arancha Lombas. "Menudo susto. Temí que se viniese detrás de mí. Llamé a la Guardia Civil y me dijeron que ya iban en camino y que me protegiese. Al final lo detuvieron", añadió. La víctima es M. M., un septuagenario que al parecer, había sido celador hospitalario durante muchos años. El hijo, P. M., de 46 años de edad, vivía con su padre en una vivienda de la aldea de El Picón, situada encima de la glorieta. El fallecido tendría otros dos hijos, más jóvenes. No ha trascendido qué pudo desencadenar la trágica agresión, solo que el hijo decapitó con un hacha a su padre.