Los polesos se preguntan desde la primera hora de ayer quién ha tenido la brillante idea de decorar a base de ganchillo una de los puntos más emblemáticos de la localidad. La famosa estatua de los bailarines, varios árboles y los numerosos bolardos colocados en varios puntos de Les Campes aparecieron teñidos de colorido a base de creaciones de lana y ganchillo, pero la identidad de los autores es todo un misterio.