"La gente valora cada vez más lo que es auténtico", destacan en la Asociación Azabache Jurásico
La entidad difunde en su certamen anual las características de un material único que, defienden, es necesario aprender a identificar
El certamen de azabachería «Eliseo Nicolás», organizado por la Asociación Cultural Azabache Jurásico de Villaviciosa, arrancó con fuerza su décima edición. Casi cien personas pasaron en su primera jornada por la sala de exposiciones del Ateneo Obrero, donde puede verse una colección de herramientas, materiales y fotografías que permiten al visitante profundizar en un «material único» y todavía desconocido a pesar de su gran valor.
El trabajo que desde hace años realiza la asociación maliayesa pretende acabar con ese desconocimiento a través de la difusión y divulgación de las características de este carbón húmico del rango de los bituminosos. Gracias a esta labor han conseguido que la gente comience «a valorar el azabache auténtico». «Hay muchas personas que buscan directamente a miembros de la asociación porque lo consideran una marca de calidad», destaca María Pérez, presidenta de la misma para quien es muy importante que cada vez la gente «sepa más, pregunten y se interesen. La labor –dice– está llegando, despacio, pero está llegando».
Porque «no todo es azabache», insiste. La realidad es que «la presencia de hidrocarburo en el momento de su fosilización fue crucial para la formación de nuestro azabache, siendo así el único que permite el trabajo de la talla con calidad y durabilidad». Al contrario de lo que pasa con otros lignitos o carbones, el azabache asturiano se mantiene estable con el paso de los años, sin que en él aparezcan ningún tipo de vetas o fisuras, aunque su identificación a simple vista en ocasiones es demasiado complicada, lo que fomenta la venta de materiales importados como si del original se tratase.
Para intentar acabar con esta práctica, la asociación ha desarrollado un proceso de indentificación utilizando su carga estática y actualmente trabaja para sacar adelante estudios que doten a este sistema de un respaldo científico. Además, se están realizando diferente pruebas de dielectricidad, «aunque todavía no hay conclusiones».
Aunque para asegurar su futuro hace falta más implicación de las administraciones. Encontrar piezas grandes de buena calidad es cada vez más difícil y los artesanos azabacheros se cuentan con los dedos de una mano. Por suerte, certámenes como el impulsado por la asociación de Villaviciosa permiten mantener todavía el interés en un material único, que es toda una joya.
El certamen se extenderá hasta el próximo 31 de marzo y el jueves, a las 18.00 horas, habrá una conferencia a cargo de Juanjo Arrojo con el apoyo técnico de Pérez.
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