Oviedo, Agencias / M. L. S.
Los transportistas asturianos volvieron a advertir ayer de las tensas situaciones que padecen los profesionales al transportar carbón a las centrales térmicas de León procedente del puerto asturiano de El Musel. Los presidentes de la Asociación de Empresarios del Transporte y Aparcamientos de Asturias (Asetra) y de la Confederación de Empresarios de Sectores Industriales del Transporte (Cesintra), Ovidio de la Roza y Enrique Riaño respectivamente, ofrecieron ayer en Oviedo una rueda de prensa en la que lamentaron la situación que sufren los conductores que llevan a los parques de Anllares y Compostilla, en León, carbón de importación, con insultos e incluso «asaltos» por parte de piquetes mineros. Ambos definieron la situación como «un polvorín», sobre todo a su paso por la localidad Villablino, y aseguraron que si la situación no se soluciona el próximo 1 de octubre y se les garantiza su seguridad, dejarán de realizar esos portes.
Roza y Riaño relataron que los camioneros llevan tiempo sufriendo presiones en esa localidad leonesa y en sus proximidades de gente a la que no les interesa que se transporte carbón de importación. Antes del verano, dos de ellos fueron agredidos y desde entonces varios han sufrido desperfectos en sus camiones. Los portavoces insinuaron que puede haber algún interés en perjudicar exclusivamente al transporte procedente de Asturias y criticaron a la alcaldesa de Villablino, Ana Luisa Durán, por aumentar la tensión al decir que el tráfico de los camiones era una provocación.
Los presidentes de los dos organismos se preguntaron las razones por las que sólo son acosados los camiones que proceden de Asturias, mientras que los que llegan de Galicia circulan sin problemas. Tampoco el tren que transporta carbón encuentra una oposición similar.
Roza y Riaño hicieron también un llamamiento al Gobierno del Principado de Asturias y a la Autoridad Portuaria de Gijón, ya que todo parece indicar que el gran perjudicado, de continuar así las cosas, sería el tráfico de graneles de El Musel, en Gijón, beneficiando de esta manera a otros puertos. Los transportistas asturianos insistieron en que sus actuaciones responden a una defensa de la legalidad. Los dirigentes de la patronal del transporte de Asturias se reunieron con distintos empresarios y cooperativas que hacen el trayecto a diario para analizar la situación.
