La decisión final sobre la construcción de nuevas carreteras -como, por ejemplo, la autovía de La Espina a Ponferrada que quiere el Principado, o la prolongación de la A-63 hasta Canero (Valdés), incluida en la programación estatal- no será exclusivamente política. La ministra de Fomento, Ana Pastor, anunció ayer en Madrid que su departamento va a llevar al Consejo de Ministros una nueva ley de carreteras que incorporará importantes novedades, entre ellas vincular la construcción de nuevas vías a que los proyectos aprueben un análisis previo que garantice su viabilidad.

La nueva legislación, según indicó Pastor, abrirá la puerta al capital privado para la construcción de aparcamientos y de áreas de servicio en las autovías. Asimismo, promoverá el diseño de lo que la Ministra denominó "itinerarios de interés general", esto es, nuevas conexiones por carretera con puntos que necesiten enlaces, como pueden ser los centros logísticos.

Además, la norma incentivará la introducción de nuevas tecnologías en el sector y la utilización de "sistemas inteligentes para conocer y controlar las características del tráfico en la red de carreteras españolas", según avanzó Pastor. Durante la clausura del IX Encuentro del Sector de las Infraestructuras que organiza Deloitte, la Ministra añadió que su departamento prevé invertir unos 900 millones en obras de construcción y conservación de carreteras en lo que resta de legislatura.

Fomento acaba de sacar a licitación contratos de conservación en carreteras por un importe de más de 70 millones de euros, de los que 11,8 se invertirán en Asturias. Así, se actuará en la A-66 o Ruta de la Plata, en las carreteras O-11 y O-12 de acceso a Oviedo, en la autovía Oviedo-La Espina (A-63) y en la N-630.