El PP es el único partido con representación en la Junta General del Principado que ayer expresó su rechazo rotundo a la fusión de áreas sanitarias que ha planteado el consejero de Sanidad del Principado, Francisco del Busto. Las restantes formaciones mostraron un mayor o menor grado de entusiasmo ante la propuesta, pero todas ellas se manifestaron dispuestas a escuchar el plan del Consejero, anticipado ayer por LA NUEVA ESPAÑA. Todos ellos apuntan una premisa esencial: que no se vea mermada la calidad de la asistencia sanitaria en las alas de Asturias.
En conversación con este periódico, Del Busto anunció que su intención es llevar al Parlamento regional una ley que convierta las ocho zonas de salud actuales en "tres o cuatro", con el fin de adaptar la estructura administrativa al contexto demográfico y a la red de infraestructuras. Lo mismo tenía previsto el anterior consejero socialista del ramo, Faustino Blanco, pero la imposibilidad de alcanzar una mayoría parlamentaria acabó por disuadirle.
"Se pongan por donde se pongan, lo que buscan es un recorte", declaró Carlos Suárez, médico y diputado autonómico del Partido Popular. Durante una visita a la localidad allerana de Collanzo, Suárez adelantó el "no" de su partido. "Pretenden reducir los servicios que reciben los asturianos", afirmó el portavoz popular en materia sanitaria. Según Carlos Suárez, el Ejecutivo autonómico "podrá disminuir el número de hospitales en la región cuando consiga esa reducción, de ocho a cuatro áreas". Cuatro hospitales, a su juicio, están en riesgo: "Jarrio, Cangas del Narcea, Arriondas y muy probablemente Langreo", señaló. Si bien la fusión de áreas no significa necesariamente el cierre, el diputado del PP añadió que "sí se reducirán notablemente los servicios que están ofreciendo".
Bastante más conciliadores se mostraron los restantes partidos representados en la Cámara autonómica. Andrés Fernández Vilanova, de Podemos, indicó que "la cuestión no es tanto el número de áreas como que se preserven las actuales prestaciones". "Vemos bien que se optimice la función directiva, que no haya más jefes que indios, pero no apoyaremos ningún cambio que perjudique al personal en cuestiones como la bolsa de empleo o la movilidad. Queremos ver el contenido detallado de la propuesta", señaló el médico y diputado de Podemos.
Desde Izquierda Unida, Gaspar Llamazares señaló que "habrá que estudiar la propuesta de la Consejería". Acto seguido precisó: "Cualquier revisión del mapa sanitario debe hacerse con participación política y social. El objetivo no puede ser recortar, sino mejorar la atención".
Esther Landa, de Foro, declinó pronunciarse hasta conocer a fondo la idea del Gobierno regional. "Vamos a esperar a la comparecencia del Consejero del próximo jueves para que explique su planteamiento", indicó Landa, quien añadió: "No estamos cerrados a ningún planteamiento, sino dispuestos a valorar cualquier propuesta siempre que no se discrimine a los habitantes de las alas de Asturias. Apoyaremos toda medida que redunde en beneficio de los pacientes".
Desde Ciudadanos, Ignacio Prendes aseguró que "escucharemos con atención lo que proponga el Consejero". Prendes se manifestó partidario de "todo lo que redunde en una mayor eficiencia de los procesos administrativos". Sin embargo, puntualizó: "No vamos a aceptar reformas que reduzcan la cartera de servicios a los asturianos, vivan donde vivan. Queremos igualdad, máxime en una comunidad como la nuestra, con tal desequilibrio entre la zona central y las rurales. A partir de aquí, estamos abiertos a escuchar todas las propuestas".
