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La polémica actualización de la fiscalidad autonómica

El PSOE pide calma a sus barones y acepta la revisión del cupo vasco

La dirección federal respalda la tesis de Javier Fernández frente a las palabras de Patxi López y del propio Pedro Sánchez

Javier Fernández y Guillermo Martínez, ayer en la Junta; en primer término la titular de Hacienda, Dolores Carcedo. L. M.

La dirección federal del PSOE, con sede en la calle madrileña de Ferraz, ha pedido calma a los "barones" socialistas en su reivindicación de revisar el modelo del cupo vasco, después de cruces de declaraciones entre dirigentes que sembraron confusión. Según medios socialistas, en estos días se han producido comunicaciones entre el entorno del secretario de organización del PSOE, César Luena, para solicitar a los máximos responsables territoriales que moderen sus discursos. Fue el propio Pedro Sánchez, secretario general del PSOE y candidato a las generales, uno de los que más contribuyó al ruido, al afirmar en Asturias que el PSOE se encuentra "cómodo con el concierto y el cupo vasco". Las conversaciones concluyeron con la constatación de que el PSOE ya tenía una doctrina al respecto, la bautizada como "Declaración de Granada", de julio de 2013, en la que no se discute el sistema pero sí se exige una revisión del cupo, como ya expresó el presidente del Principado, Javier Fernández.

La presidenta andaluza, Susana Díaz, inició el debate al decir ante el lehendakari Iñigo Urkullu (PNV) en un desayuno público en Madrid que "no todas las comunidades autónomas están bien financiadas y hay unas peor financiadas que otras. Digo que hay que modular el cupo [vasco]". Fue esta una tesis que apoyaron otros barones socialistas, entre ellos el presidente de Asturias, quien incidió en que el cálculo del cupo debe ser "transparente" y que concede a País Vasco y Navarra "unos recursos muy superiores a los del sistema general".

Pero la caja de los truenos se destapó 24 horas después, cuando el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, afirmó en su visita a Asturias que "los socialistas nos sentimos a gusto, cómodos, con el cupo vasco y con el concierto vasco", e hizo hincapié en que "no están en cuestión" los conciertos, garantizado por la Constitución, ni los cupos. La puntilla la puso el exlehendakari Patxi López (secretario general de los socialistas vascos) al asegurar que "algunos dirigentes socialistas "no han estado muy finos" al hablar del concierto vasco, y aunque matizó que "hay que entender que algunas comunidades están en una situación financiera dramática", garantizó que todo el partido "respeta y defiende" el Concierto, "sin cambiar una coma".

Fuentes del PSOE incidieron ayer en que "no hay discrepancias" en las filas socialistas, y que lo que defienden ya está recogido desde 2013 en la "Declaración de Granada", en el que se especifica: "Las instituciones del concierto y el convenio del País Vasco y Navarra deben seguir manteniendo reconocimiento institucional, sin perjuicio de perfeccionar algunas de sus deficiencias en su aplicación práctica".

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