Es una casa amplia, con bajo, dos plantas y buhardilla. Está ubicada en la esquina de las calles Hospital y San Francisco, en el casco antiguo de Navia, y desde hace 38 años es propiedad de la familia de Javier Ledo, detenido ayer como presunto autor de la muerte de Paz Fernández. El inmueble se ubica a escasos cincuenta metros de la pensión San Francisco, donde la gijonesa había reservado habitación para la noche del 13 de febrero, cuando desapareció.
Esta propiedad pasó a manos de la familia del ahora detenido cuando su abuelo la intercambió por una finca en la zona de El Ribazo. En el local de la planta baja se ubicó, durante muchos años, el bar Anes. Pasó después, en los setenta y ochenta, a convertirse en un negocio nocturno, bajo el nombre de "El Pirata", uno más de los bulliciosos pubs que conformaban la conocida y afamada "ruta" naviega.
El registro de esta vivienda ocupó gran parte de la jornada de ayer. Los agentes buscan allí la prueba definitiva del asesinato de Paz Fernández. Casi dos horas les tomó a los agentes de la Guardia Civil realizar la primera inspección de la vivienda por la mañana. Las labores de registro continuaron por la tarde, tras el paso de Javier Ledo por el Juzgado de Luarca. En torno a las tres de la tarde los agentes volvieron a la casa para un segundo registro, que se prolongó hasta las doce menos cuarto de la noche.
