El niño de cinco años que resultó herido el pasado viernes en la avenida del Gayo de Luanco no fue atropellado por el vehículo sino que el menor impactó contra un lateral del coche, según indicaron testigos del suceso que constaba en el atestado.

El menor cruzaba solo y corriendo, según señalaba el relato policial del incidente. Sufrió daños en la cabeza y tenía una pierna rota. El pequeño era natural de Madrid. El conductor aseguró que no vio al menor porque había un coche estacionado.