El embalse de Trasona reunió ayer a un grupo de mujeres que reman juntas para luchar contra el cáncer de mama. Quince cántabras y diez murcianas practicaron ayer en aguas corveranas remo en embarcación "dragón", un bote para veinte personas y un timonel. La iniciativa fue de los integrantes del equipo Asturias Dragon Boat: "Estamos intentando formar un equipo femenino aquí y nos parece una iniciativa bonita. Sabíamos que en Santander estaban haciendo un equipo de mujeres afectadas por el cáncer de mama y les ofrecimos nuestra embarcación para que aprendan", explica Fran González, integrante del equipo asturiano. Cuando se enteraron en Murcia, las integrantes del primer equipo español de mujeres afectadas por la enfermedad se ofrecieron a ayudar y se plantaron en Corvera.

El remo en embarcación dragón tiene dos cosas positivas para las mujeres que sufren cáncer de mama. La primera es que "cualquiera puede practicarlo porque la embarcación es muy estable y no necesita una gran forma física", según explicó González; la segunda, que el remo es un gran aliado para luchar contra la linfedema (un tipo de edema), una de las consecuencias del cáncer de mama: "En la Asociación Española contra el Cáncer llevamos años trabajando para prevenir el linfedema y hay estudios que recomiendan este deporte", explica Sonia López, terapeuta de la mujeres de Santander, que apenas llevan unos meses preparando el equipo. Ayer, las cántabras se subieron por primera vez a una dragón, y disfrutaron con la experiencia.

En su tierra tienen que remar en trainera (algo más pequeña), ya que la embarcación que probaron ayer en Trasona no puede navegar con oleaje y su sitio de entrenamiento es la bahía de Santander. Así, es probable que vuelvan pronto a Corvera. La idea en Santander nació de Chepe Sáez, uno de los fundadores de "Santander en Boga", un proyecto para preservar la navegación tradicional. "La primera vez que vimos a mujeres afectadas remar fue en el 'Bogalonga' de Venecia y se nos ocurrió traerlo".

Las murcianas, del club UCAM Pinaterense, son las mayores expertas que hay ahora en España, aunque la primera vez que se lanzaron al agua fue en abril. Ellas, que son de San Pedro de Pinatar, llegaron al remo en dragón a través de un congrego internacional en la lucha contra el cáncer en Murcia. En él, mujeres de países como Canadá, Inglaterra o Francia compitieron en una prueba de esta modalidad. "Había mujeres de 70 años remando, estamos a años luz de otros países. Probamos y nos encantó, así que seguimos con la actividad", afirma Maxi Murcia, capitana de las mujeres de Pinatar.

En el equipo asturiano ya hay varias mujeres, que no sufren la enfermedad, pero quieren seguir creciendo y hasta algún día montar una embarcación para mujeres afectadas por el cáncer. "Es una forma de ayudar. Nosotros somos piragüistas de varios clubes. Empezamos con los justos para competir y ya somos unos treinta. Además no se nos da mal, en tres competiciones que hemos hecho, ganamos", señaló Fran González, que explicó que se costean todo.