Las horas que transcurrieron desde que el dominicano E. N. G. U. llegó a Asturias procedente de Bélgica, el viernes pasado, hasta que se le perdió la pista a primera hora del sábado, tras matar supuestamente de una puñalada en el corazón a su compatriota y "cuñado" Daniel Capellán en El Cruce de Llaranes, resultan fundamentales para la investigación de la Policía Nacional. Las fuentes consultadas apuntan a que uno de los focos de la investigación que están realizando los agentes asturianos está en saber con quien estuvo o contactó el presunto homicida durante esas poco más de 24 horas desde su llegada hasta su desaparición, por si alguien lo ayudó a fugarse.

E. N. G. U., que tiene carta de residencia belga, llegó en avión a Asturias el viernes con su novia, Clari Capellán, para asistir al concierto en Gijón de Yiyo Sarante, el salsero del momento. Ella es hermana de Daniel Capellán, vecino del barrio de Sabugo, fundador de la Asociación de Dominicanos de Avilés, y relaciones públicas. La pareja recién llegada, familiares y amigos, entre ellos Daniel Capellán, acudieron a la fiesta en la sala gijonesa.

¿Con quién estuvo E. N. G. U. desde que aterrizó en Santiago del Monte hasta que fue al concierto a Gijón? ¿Contactó con alguien más que con los familiares de su novia? Estas son algunas de las preguntas que intenta responder la Policía, que ya hace días emitió un orden internacional de búsqueda y captura. A ésta, como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, se une la orden europea e internacional de detención que emitió el martes el juez a cargo del caso, Julio Juan Rodríguez Zahonero (titular del juzgado de instrucción número 5 de Avilés). La Policía Nacional solicitó la medida al juzgado ante el temor de que el hombre buscado por apuñalar de muerte a Daniel Capellán pueda haber salido del país e incluso haber llegado al suyo de residencia.

Lo que ha trascendido hasta el momento de las horas previas al crimen es que E. N. G. U. agredió supuestamente a su novia Clari, hermana de Daniel Capellán, en el concierto de la sala gijonesa. Ése fue supuestamente el germen de la pelea que se desencadenó luego en el bar El Milenio, donde la pandilla fue a desayunar. Ahí fue donde E. N. G. U. se hizo según los testigos con un cuchillo de cocina y se lo clavó en el corazón a Capellán cuando ya estaba fuera del bar.

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