Pola de Lena,

C. M. BASTEIRO

El equipo de Gobierno de Lena no está dispuesto a ceder en su negativa a la construcción de una nueva subestación eléctrica en los terrenos del polígono de Villallana. El alcalde, Ramón Argüelles, mantuvo ayer una reunión con la directora general de Minas, Carolina Morilla, y el director general de Industria, Javier Méndez, en la que propuso utilizar las líneas y subestación de Telledo, construida para alimentar las obras de la Variante ferroviaria de Pajares, para el suministro de energía al parque empresarial de Villallana.

El regidor explicó a los responsables autonómicos que «el Ayuntamiento no contempla como factible una subestación dentro del polígono, debido a dificultades administrativas». En este sentido, Argüelles añadió que «su construcción no está incluida en el proyecto inicial, por lo que requeriría una modificación sustancial de proyectos y autorizaciones». Desde su punto de vista, «una alternativa sería reforzar la línea proveniente de la subestación de Telledo para suministrar al parque industrial». La subestación de Telledo «se construyó para la perforación de los túneles de la Variante de Pajares y, en este momento, apenas se utiliza». Esta medida «permitiría reforzar las posibles necesidades futuras de las empresas que ocupen el polígono industrial».

La respuesta de los responsables autonómicos, según el regidor, «ha sido de respeto, aunque se apreciaban otras alternativas». No es la primera vez que el Ayuntamiento de Lena propone el cambio de ubicación de la subestación. Red Eléctrica Española (REE) plantea como única solución la construcción de la subestación dentro del área industrial de Villallana. El plan no ha sido respaldado por el Ayuntamiento de Lena, que ya en el anterior mandato presentó dos alternativas para mejorar el suministro eléctrico en el parque industrial. Como posibles ubicaciones, Lena ofreció terrenos de la escombrera de Retalente, cercana al polígono, y en una zona de monte también muy próxima. Estas dos alternativas fueron rechazadas y, hasta el momento, no se ha llegado a un acuerdo.

Además de los problemas administrativos que traería consigo la construcción de la subestación en el área industrial, según Argüelles, esta instalación también «robaría terreno» al futuro polígono. Villallana cuenta con dos empresas asentadas: Asturiana de Laminados (Asla) y Rioglass Solar. Las dos compañías aseguran estar «al límite» y advierten de que no cuenta con suficiente suministro eléctrico para sus factorías y han solicitado la mediación del Idepa para buscar una solución.