La obra en el paseo marítimo de Candás -cerrado para mejorarlo de cara a la etapa de la Vuelta a España- llega a su fin envuelta en polémica. La principal, por la presencia de trabajadores municipales en una obra adjudicada a una empresa, denuncia el PP. José Ramón Fernández, portavoz de los populares, asegura que "el gobierno reconoce que la empresa no está arreglando todos los baches porque después de la contratación, en el replanteo, vieron otros nuevos. Y esos los arregla el ayuntamiento".
El otro conflicto en el paseo es el uso de personal de las obras del aparcamiento de Severo Ochoa para el rebacheo, dejando abandonada la obra de la parte alta. "Es una auténtica vergüenza", se quejan en Severo Ochoa. "Ha estado parada más de una semana y ahora nos mandan a un hombre de pega, con una excavadora con un martillo hidráulico de juguete que lleva desde el viernes en el mismo sitio, bajo mi ventana". Según los testimonios de los vecinos, "vienen a las siete de la mañana, se cambian y se van".
"Si cobran por trabajar todo el plazo, es un fraude que desvíen trabajadores a otra obra", denuncia el PP. "Si el plazo es de tres meses y lo hacen en la mitad, algo raro hay. Tendrá que cobrar menos la empresa, al menos por la mano de obra", indica el PP.
Las obras del paseo marítimo afrontan esta semana su recta final. La apertura al tráfico de la vía está prevista para el 1 de junio y al día siguiente, sábado, ya está programado el paso por el paseo de una prueba atlética, la segunda carrera popular La Marinera. Los trabajos de rebacheo en el firme han concluido en gran parte del paseo, pero quedan tramos pendientes de sustituir los adoquines, principalmente en la zona cercana al aparcamiento de Palmera. También hay zonas sin reparar en las cercanías de la villa.
