Mieres del Camino,

David MONTAÑÉS

El tercer conde de Mieres, Manuel Loring Martínez de Irujo, falleció el pasado 5 de abril en Madrid tras ostentar este título durante más de tres décadas. Era nieto del primer conde de la villa y bisnieto de Numa Guilhou, fundador de Fábrica de Mieres, la locomotora siderúrgica que, junto a las minas, impulsó el crecimiento económico del concejo. Con su muerte desaparece unos de los vínculos existentes entre dos épocas: la de la eclosión industrial y la actual, con un Mieres que busca nuevos horizontes fuera del cobijo de las grandes empresas. Pese a que desarrolló su vida familiar y profesional lejos de su concejo natal, siempre mantuvo una estrecha vinculación con el territorio, presidiendo la asociación Norte Joven, que atiende a personas con riesgo de exclusión laboral, y manteniéndose al frente de la sociedad Fábrica de Mieres, que custodia el legado patrimonial de la antigua factoría.

Manuel Loring nació el 24 de septiembre de 1946 en Mieres. Tenía, por tanto, 61 años. Deja tres hijos. Su funeral se oficiará el próximo lunes, 14 de abril, a las ocho y media de la tarde, en la parroquia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro (Manuel Silvela, 16), de Madrid. El fallecimiento ha despertado sentimientos de tristeza y cierta nostalgia entre quienes lo trataron, entre ellos el actual alcalde del municipio, el socialista Luis María García: «Era una persona que, pese a que hizo su vida fuera del concejo, se preocupaba por los problemas de su pueblo y mantenía una estrecha relación con el Ayuntamiento a través de Norte Joven». El regidor quiso ayer trasladar a la familia «el cariño de los mierenses».

Pese a residir en Madrid, el conde de Mieres ha mantenido una intensa relación personal y profesional con Asturias, sobre todo, además de con su concejo natal, Gijón. Fue consejero de la Fundición Nodular y presidente de Consignas Asturias, entre otras responsabilidades empresariales. Su título nobiliario no era su única vinculación con los valles mineros, ya que era ingeniero de minas y estaba diplomado en economía por la Escuela Superior de Petróleo de París.

Manuel Loring, paradójicamente, no era una persona excesivamente conocida en Mieres, pese a los fuertes lazos que unen a su familia con el concejo. Persona discreta y poco aficionada a participar en actos sociales, visitaba la ciudad tres o cuatro veces al año para, principalmente, seguir el funcionamiento de la asociación Norte Joven, que presidía desde su fundación, hace doce años. Esta entidad cultural, asentada en la antigua estación de ferrocarril, se dedica a formar y a atender a jóvenes en riesgo de exclusión social mediante la formación en un oficio que les facilite su acceso al mundo laboral. Ofertan talleres prelaborales de carpintería, soldadura y construcción metálica y reparación y montaje de equipos electrónicos e informáticos. Su jefe de estudios, Javier Álvarez, definió ayer al fallecido como «una persona muy comprometida con el concejo, que, pese a tener que atender numerosos compromisos profesionales, siempre estuvo interesado en seguir de cerca la actividad de la asociación».

La familia Loring recibió el título de conde Mieres en el año 1911, de manos de Alfonso XIII, con quien mantenía una buena amistad. El abuelo de Manuel Loring, del mismo nombre, recibió así el primer título nobiliario otorgado en Asturias el pasado siglo. Con el estallido de la guerra civil, el empresario se vio obligado a exiliarse. Falleció en Bayona en 1937. Por otra parte, su abuela, de nombre Carmen, era una de las dos hijas de Numa Guilhou, según recuerda el historiador Ernesto Burgos. «En aquella época aún era frecuente que la nobleza y la alta burguesía unieran familias a través del matrimonio». Del citado enlace nacieron tres hijos; el mayor, padre del fallecido, heredó el título familiar, que en 1976, tras su muerte, traspasaría al hasta ahora tercer y último conde de Mieres.

Manuel Loring Martínez de Irujo era el tercero de once hermanos. No obstante, al ser el primer varón, se convirtió tras el fallecimiento de su padre en conde de Mieres. Su madre era hermana del primer marido de la duquesa de Alba.