Mieres / Langreo,

José A. ORDÓÑEZ

Miguel Sebastián se ha colocado al frente del proyecto leonés de captura de dióxido de carbono (CO2), al que, de paso, confirma como el candidato oficial de España a una de las doce plantas de referencia continental que tiene previsto autorizar la Unión Europea (UE) en los próximos años, a una de las cuales también aspira Asturias a través de los importantes avances logrados por el Instituto del Carbón (Incar) en Oviedo. El ministro de Industria fue nombrado ayer presidente de la Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden) de Ponferrada, la institución que lidera la investigación sobre esta materia en la provincia vecina, en el transcurso de un acto celebrado en la Moncloa y que, de nuevo, dejó bien a las claras el tremendo apoyo que le dispensa el Ejecutivo de Zapatero: la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, y la de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, fueron designadas vicepresidentas de la Fundación.

Tras el acto, el Ministerio de Industria emitió una nota pública en la que recuerda que Ciuden es una Fundación estatal creada en mayo de 2006 y que «uno de sus proyectos más relevantes» es el relacionado con el CO2, que se desarrolla en la localidad berciana de Cubillos del Sil, junto a la central térmica de Compostilla II, propiedad de Endesa. El comunicado del departamento que dirige Sebastián, persona de la máxima confianza de Zapatero, señala textualmente que «la Unión Europea está elaborando en la actualidad el mapa de ubicación de los doce proyectos de investigación para captura y almacenamiento de CO2. El proyecto de investigación ubicado en El Bierzo es el de referencia como candidatura española ante la Unión, candidatura que está respaldada por el Gobierno de España». De Asturias y del Incar, ni una sola palabra.