El candidato del PSOE a la Presidencia del Principado, Javier Fernández, ha anunciado hoy que ofrecerá un acuerdo a una derecha "incapaz de pactar consigo misma" para superar el grave problema demográfico que sufre Asturias "cuando se civilice en la oposición" tras las elecciones del 25 de marzo.

En un acto organizado por el PSOE en el Aula de Cultura de Sotrondio con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora mañana, en el que ha estado acompañado por el secretario general de esta formación, Alfredo Pérez Rubalcaba, Fernández ha señalado que, entre tanto, los socialistas pactarán cuestiones trascendentales como ésta para la región "con la sociedad"

El cabeza de lista del PSOE ha incidido, al igual que Rubalcaba, en el "paso gigantesco" que dio España en los últimos ochos años en materia de igualdad con la aprobación de leyes que se han convertido en un referente incluso para los países más avanzados.

No obstante, ha advertido de que la igualdad legal es sólo "un paso más hacia la igualdad real" y lo ha comparado con la promulgación en Estados Unidos hace décadas de leyes contra la discriminación racial sin que ésta se haya erradicado plenamente porque el machismo "tiene raíces tan profundas como el racismo".

Según Fernández, los criterios del PP en este ámbito -"asesorado e influido por la única empresa de solteros del mundo", en alusión a la Iglesia Católica- los reflejan las afirmaciones del ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, sobre la existencia de una "violencia de género estructural contra la mujer por el mero hecho del embarazo".

A su juicio, Ruiz Gallardón ha negado así el carácter de derecho a la interrupción voluntaria del embarazado a través de una "malversación de las palabras" dado que el PP tiene miedo a nombrar la violencia del hombre contra la mujer y no asume que el machismo "tiene una raíz bíblica y milenaria".

En el acto, en el que han participado representantes de diversas asociaciones de mujeres, ha intervenido también la secretaria de Igualdad del PSOE, Purificación Casapié, ha advertido de que en los últimos años cada 8 marzo, Día Internacional de la Mujer, servía para celebrar avances en derechos pero que el de 2012 debe servir para decir que las mujeres no quieren "dar ni un paso atrás". EFE