El grupo parlamentario del PP en la Junta General del Principado ha presentado una proposición no de Ley para incentivar «la reestructuración y reforestación» de las comarcas mineras. La propuesta tiene como finalidad, según explicaron ayer los portavoces del partido, «crear puestos de trabajo y avanzar hacia la regeneración económica de estas zonas del Principado». Se trata, en síntesis, de abrir nuevos campos de actividad económica al margen de la extracción del carbón para ampliar las posibilidades de futuro para la empresa Hunosa.

El PP ha impulsado esta proposición no de ley coincidiendo con la decisión de Hunosa de construir una central eléctrica de biomasa en el polígono industrial de Reicastro, en Mieres. La decisión ya está tomada y la empresa estatal incluso ha iniciado los trámites para desarrollar el proyecto energético. La iniciativa parlamentaria ahonda en este camino. De hecho, plantea «explorar nuevos nichos de empleo en campos como las empresas de frutales, los cultivos de biomasa o las energías renovables». El PP considera que se trata de áreas «en las que las medidas que se adopten puedan coordinarse con los planes que la empresa Hunosa, en el ámbito de sus competencias, desarrolla para seguir avanzando en el mantenimiento de la compañía y del empleo de sus trabajadores».

El PP asegura que, en la actual coyuntura económica, «es preciso buscar nuevas fuentes de riqueza y de creación de empleo, con la consiguiente regeneración de la vida económica». Así, los dirigentes populares instan al actual Gobierno regional a que se sume al proyecto y colabore activamente para dar forma a esta actuación de redinamización del territorio: «Sería conveniente que el Gobierno del Principado explorase potencialidades de las zonas mineras que actualmente no se explotan para, a través de la elaboración de un inventario y del consiguiente análisis de las escombreras, balsas, lavaderos y bocaminas, se pueda avanzar en la reestructuración de la actividad extractiva y la regeneración de la actividad económica».

Ante la caída de la actividad minera, Hunosa están buscando nuevas actividades generadoras de riqueza y empleo dentro de sus campos de actuación. El de las energías limpias es uno de los principales. Está desarrollando proyectos vinculados a la energía geotérmica, de captura de CO2, de aprovechamiento del metano de las minas y de las capas de carbón, de energía eólica y ahora también de biomasa. Los primeros pasos se dieron con la aprobación del plan forestal de Hunosa, que prevé una inversión de cinco millones de euros en la plantación de 1,2 millones de árboles en 3.000 hectáreas de terreno de las antiguas minas a cielo abierto de La Braña del Río, La Matona, Mozquita, L'Abeduriu, San Víctor, El Cantil y Coto Bello.

El desarrollo de la planta de biomasa de Reicastro ya ha tomado cuerpo en los despachos y ahora solo falta ponerlo en marcha. El área empresarial, cuya urbanización costó más de 2,6 millones de euros, dispone de todos los servicios básicos.