Durante la festividad de Semana Santa, el balón de fútbol echa a rodar. La Oviedo Cup se consolida como uno de los torneos más prestigiosos del país en estas fechas. Cada temporada, esta competición se afianza y aumenta su notoriedad, lo que implica que el número de equipos que participan en ella sea mayor. Durante estos días, más de 4.500 participantes, de distintas edades, se darán cita en el Principado de Asturias para tratar de conseguir el trofeo.

El aumento del número de equipos trae consigo la necesidad de encontrar nuevos escenarios para la disputa de los partidos. En las últimas temporadas, distintas poblaciones han ido ofreciendo sus apoyos para la disputa de estos encuentros. Campos como el de Santa Bárbara (Lugones) o el Pepe Quimarán (Posada de Llanera) han sido sede del torneo en las últimas ediciones. Para esta ocasión, El Bayu (Siero) y el Mundial 82 (Mieres) son las principales novedades en una Oviedo Cup que se externaliza.

Hoy, después de dos días en los que los partidos del torneo se disputaron en Oviedo, darán comienzo los encuentros en estas cuatro sedes. Una repercusión que va más allá de lo futbolístico y que redundará en beneficios para las localidades. El coordinador de los equipos de fútbol base del Caudal, Román Cándano, señaló que "es importante que la organización se haya fijado en nosotros para celebrar en nuestras instalaciones parte del torneo".

Un total de 16 de encuentros se disputarán en los campos del Mundial 82, lo que para Cándano implica que "canteras importantes, como la del Rayo Vallecano, el Valladolid o el Zaragoza puedan jugar en Mieres". Esta competición llega en un momento importante para el fútbol base caudalista. "Queremos relanzar nuestra cantera", admite Cándano, por lo que los equipos mierenses se puedan enfrentar a conjuntos de Primera División, y que los niños de la zona puedan verlo, "supone un atractivo considerable".

Desde hace dos meses, las instalaciones del Caudal se preparan para este torneo. La amistad de Cándano con Nacho Canal, uno de los organizadores del torneo, fue uno de los factores fundamentales para que se decantaran por llevar una serie de partidos a la localidad mierense. La disputa de los encuentros supone "poco trabajo" para el club mierense, ya que "la organización se encarga de todo, te lo dan hecho", explica Cándano. Para el coordinador se trata de "un evento deportivo que redundará en beneficio de Mieres".

El Caudal no recibirá ninguna compensación por ceder las instalaciones, más allá de la publicidad que la celebración de este prestigioso torneo supone. El ambiente de fútbol estará presente en Mieres hasta el próximo sábado, fecha en la que se disputan las últimas eliminatorias en distintas sedes, antes de la disputa de las finales en Oviedo.