El Centro Terapéutico de Rehabilitación en Drogodependencias de Mieres ha crecido en los últimos años. Actualmente, recibe a usuarios de toda la región, derivados a través de distintos servicios. La mayoría de los ingresos del año pasado llegaron a través de consultas directas a la entidad. Ocho pacientes iniciaron su terapia en el RED derivados desde el sistema judicial.

Elizabeth Ortega, psicóloga del RED, señala en este punto que la última reforma del Código Penal resulta "contraproducente" para las personas que sufren una adicción. La tipificación de algunos actos como delitos, cuando antes eran considerados faltas, acerca más a los ciudadanos a la privación de libertad para el cumplimiento de condenas. "En el caso de personas con un historial de adicción, esto puede ser fatal. La cárcel, digan lo que digan, no reinserta", señaló la representante del centro terapéutico.

Los convenios del servicio mierense van más allá. Durante el último año, el RED también recibe a personas que ingresan en salud mental. Son más mujeres que hombres los que llegan a través de esta vía, ya que "en mujeres solemos ver más casos de adicción a las benzodiacepinas y otros fármacos legales que terminan por formar parte de un policonsumo".

La terapia del RED tiene como objetivo la reinserción total de los pacientes. Es por eso que los usuarios pasan por una serie de etapas que van desde el reconocimiento del problema de adicción, en ocasiones la fase más dura, hasta su ocupación. Con la llegada de la crisis, la búsqueda de empleo es más difícil. Es por eso que el RED sustituye la reinserción laboral por la recuperación de los estudios, formación en un nuevo sector o talleres ocupacionales.