La plantilla de Mieres Tubos desconvocó ayer la huelga que mantenía la empresa de Sueros parada desde hace más de dos semanas. La decisión se tomó tras aceptar la dirección pagar la mayor parte de la deuda salarial que mantiene la empresa con los trabajadores. Así, los empleados regresaron ayer mismo a sus puestos. Y es que la fábrica tiene pedidos y materia prima para funcionar con normalidad tras dos años con la actividad suspendida.

CC OO explicó que la empresa se ha comprometido a abonar la próxima semana la paga extra íntegra de verano y los salarios adeudados correspondientes al mes de septiembre. Quedaría pendiente de pago los salarios del mes de octubre, cuyo compromiso ha sido el de pagarlos a la mayor brevedad posible. Una vez sometido el acuerdo a la asamblea de trabajadores, éstos decidieron desconvocar la huelga que estaba prevista para los días 15, 16, 17 y 18 de este mes.

Los trabajadores, una vez de nuevo en sus puestos, quedarán bajo los contenidos del expediente de regulación de empleo (ERE) aprobado en su momento. Desde CC OO de Industria de Asturias aseguraron ayer que "estaremos vigilantes para que el acuerdo que se ha suscrito se desarrolle en todos sus términos y que seguiremos comprometidos para que la empresa recobre la normalidad y la actividad al cien por cien". Manuel Pérez Uría, responsable de la Secretaría de Política Industrial en CC OO de Industria, también quiso trasladar a la empresa que "sólo a través del diálogo y de los compromisos se podrá desarrollar el plan de viabilidad pactado con los representantes de los trabajadores".

Pese al acuerdo, la situación de Mieres Tubos sigue siendo complicada. El mes paso se truncó la negociación que durante meses se mantuvo con un inversor para que desembarcase en la compañía, aligerando así la pasada deuda de la misma. La auditoría encargada por el inversor sacó a la luz una deuda "oculta" de dos millones de euros, que se sumarían a los ocho millones necesarios para poner en marcha de nuevo la factoría mierense a pleno rendimiento.

Aún así, la factoría de Sueros tiene ahora mismo pedidos. Un acuerdo con Arcelor permitió la llegada de materia prima a la planta, que estuvo funcionando el mes pasado apenas unos días, hasta la convocatoria de huelga.