Hace más de una década que los esquiadores de Pajares no podían disfrutar de todas las pistas del complejo invernal lenense. No existía por entonces Fuentes de Invierno, y Valgrande era la única alternativa en Asturias para practicar los deportes de invierno. La otra era San Isidro. En aquel año 2005 fue la última vez en la que los usuarios pudieron deslizarse por cualquier pista de la estación lenense, ya que todas estaban abiertas. Hoy, salvo imprevistos, podrán volver a hacerlo.

La estación de Valgrande-Pajares tiene previsto abrir el cien por cien de su dominio esquiable, esto es 37 pistas (4 negras, 14 rojas, 10 azules y 9 verdes), así como los 8 remontes de los que dispone la estación. También estará operativa la pista de fondo. En total, casi 37 kilómetros de nieve en la que turistas y esquiadores podrán disfrutar del puente de Carnaval.

Un puente que todo hace indicar que será histórico. Y es que los alojamientos de la comarca del Caudal vinculados al sector de la nieve han colgado el cartel de completo. En los valles de Aller y Lena apenas quedan camas libres. Incluso negocios como las escuelas de esquí o los alquileres han recibido numerosas reservas y demandas. Los portavoces de las asociaciones hosteleras más representativas, Asturcentral y Aller Experiencias, se han mostrado encantados con el desarrollo de puente de Carnaval, una de las fechas más importante para el sector, unido a las Navidades y a la Semana Santa. Cuatro días en los que los complejos asturianos reunieron el pasado año a más de 11.000 personas en pistas y que, dadas las condiciones que se presentan esta temporada, podrían superarse con cierta holgura.

Los alojamientos están preparados, la nieve están en las pistas y los trabajadores a pleno rendimiento para que todo esté perfecto. Ahora sólo falta que el tiempo dé un respiro para que los próximos días los aficionados al mundo de la nieve puedan vivir en Asturias una experiencia única.