Detenido un conductor en La Felguera por negarse a hacer la prueba de alcoholemia y dar dos cabezazos a un polícía

La Policía Local de Langreo detuvo en la madrugada de este lunes a un conductor por negarse a hacerse la prueba de alcoholemia y agredir a un agente. Los hechos tuvieron lugar sobre las 00.35 horas, cuando una patrulla de la Policía Local circulaba por la calle Ingeniero Fernández Casariego de La Felguera. Allí observaron cómo un "vehículo circulaba de forma anómala, dando grandes acelerones por lo que se procedió a darle el alto", informó el gobierno local.

El atestado recoge que los policías observaron que el conductor del vehículo se encontraba "claramente bajo los efectos de bebidas alcohólicas, mostrando un comportamiento hostil y desafiante hacia los agentes, negándose en todo momento a realizar las pruebas y arremetiendo contra uno de los policías, dándole dos cabezazos en el pecho". Ante estos hechos, "se procedió a su detención y traslado a dependencias de Policía Nacional”.

Hubo otra detención, el pasado sábado, a las 11.40 horas, cuando la Policía Local realizaba un control de documentación en el distrito de La Felguera en el que se arrestó a un conductor de un vehículo que "carecía de permiso de conducción". Arrojó también "un resultado positivo en las pruebas de alcoholemia, triplicando el límite establecido en las mismas".

Está siendo un mes intenso para la  Policía Local de Langreo. El pasado 15 de abril agentes de este Cuerpo detuvieron de madrugada a un hombre por herir presuntamente a su pareja y dejar en la escalera a una niña de siete años, sobrina de la mujer. Según indicó entonces el gobierno local de Langreo, los hechos tuvieron lugar sobre las 1.25 horas, tras recibirse una llamada del 112 informando de una discusión muy fuerte en un inmueble de La Felguera.

En su informe, los policías señalaron que, a su llegada, se encontraron "en la escalera a una niña de 7 años llorando, que manifiesta que el novio de su tía la había echado de casa". Al llegar a la puerta del inmueble la hallaron abierta y "con sangre en el suelo, localizando a una joven con un corte en una mano" que informó a los agentes "de una discusión con su novio en la que este le había quitado la cartera y el teléfono, que pisoteó varias veces, para que no pudiera avisar a la Policía, llegando a romper parte del mobiliario de la casa". En el lugar, la joven manifestó que "estas discusiones son algo habitual" y que tenía "miedo de dejar a su pareja por las amenazas que sufre".