El Real Oviedo salió derrotado ante el Lemona en El Tartiere por un resultado final de 1-2. Y eso que los azules se adelantaron en la primera parte gracias a un gol de Manu Busto pasada la media hora de juego. En una espléndida jugada personal, tras un pase de Pelayo, el cántabro firmó una magnífica vaselina a la que no pudo llegar el meta Alcalde (1-0).

El primer tiempo se caracterizó por el dominio de los locales en el terreno de juego. Fueron muchas las ocasiones que tuvieron los azules para ampliar su ventaja en el marcador. La falta de precisión en los remates contribuyó a la derrota final de los de Pichi Lucas. Los delanteros locales, a excepción de Manu Busto, no consiguieron que el esférico tocase la red de la portería defendida por Alcalde. El Lemona despejaba los centros al área que enviaban de forma constante el Real Oviedo impidiendo así una mayor ventaja de éstos al descanso.

Las únicas ocasiones de gol del equipo vasco en el primer tiempo llegaron en jugadas a balón parado. En un lanzamiento de falta, Aulestia despejó el balón, mientras que en un peligroso saque de esquina, fueron los centrales los que impidieron los remates de los delanteros del Lemona.

En la reanudación, los de Pichi Lucas se esforzaron en ampliar la ventaja, pero jugadores como Perona o Miguel perdonaron en exceso. Precisamente Miguel, pudo marcar en el minuto 55 al aprovecharse de un error de la defensa del Lemona, pero el portero desvió el balón en el último momento. Siete minutos después, Perona perdonaba el 2-0 al no conseguir rematar bien de cabeza un balón a escasos metros de la portería.

En los últimos minutos los jugadores azules sufrieron un bajón físico considerable. Miguel y Pelayo de hecho, se tuvieron que retirar del terreno de juego por problemas físicos. Esto, unido al cambio de juego que se volvió impreciso y sin ordenación en las líneas hizo que el Lemona llegase con más peligro al área de Aulestia. Ya en los instantes finales, Urko Vera fue el encargado de dar la vuelta al marcador con dos tantos de cabeza en los minutos 86 y 89. En las dos ocasiones superó por alto a la defensa local, que con claros errores, sentenciaba al Oviedo a una nueva derrota.

Al final 1-2 en el marcador del Tartiere y una nueva desilusión en la afición azul que despidió a su equipo con gritos de protesta exigiendo la dimisión del cuerpo directivo y del entrenador.