El sueño del Oviedo balonmano femenino corre peligro de no poder cumplirse. El equipo carbayón, que acaba de ascender a División de Honor Plata después de uno de sus años más brillantes en cuanto a resultados, necesita alrededor de 30.000 euros para poder salir a competir el año que viene, ya que los gastos se incrementan considerablemente de una categoría a otra.

«Este año necesitamos el triple de presupuesto que la pasada campaña, ya que el precio de las licencias sube, debemos realizar más viajes que el año pasado y más costosos, y a eso se une que los arbitrajes de Primera a División de Honor Plata suben de 90 a alrededor de 400 euros. Por el momento solo contamos con unas pequeñas ayudas y las subvenciones regionales y locales, pero como se reciben en función de la categoría en la que militamos la temporada pasada, será pequeña», comenta Iván Gallego, vicepresidente y director deportivo del club, quien dejará su cargo próximamente. «Este año va a cambiar la directiva, pero tanto Javier Elosegui, el presidente, como yo estamos colaborando con ellos en la planificación de la nueva campaña», apuntó.

El plazo para conseguir esos 30.000 euros finaliza el próximo 30 de junio, día en que se celebra en Guadalajara la Asamblea General de la Federación Española, por lo que, según reconoce Gallego, la situación «es desesperada. Necesitamos una empresa potente que nos ayude, y creo que este es un momento apetecible para invertir en este club ya que hemos sido quintos de España en juveniles, campeones de Asturias en infantiles y juveniles, contamos con una jugadora internacional y varias en la selección regional, y estamos entre las escuelas más potentes del país». El mensaje de Gallego a los empresarios es claro. «Con 30.000 euros nos garantizamos la supervivencia, ya que tenemos un buen equipo, una cantera de futuro, y no necesitaríamos fichar extranjeras. La inversión es mínima, pero para nosotros supondría un mundo».

Lo que descarta Iván Gallego es que el Oviedo pueda aventurarse a disputar la segunda categoría del balonmano nacional si no consigue la cantidad que necesitan. «No nos vamos a arriesgar a inscribirnos y luego quedarnos sin dinero a mitad de temporada y tener que retirarnos, ya que eso nos supondría también una sanción».