Queda un último esfuerzo antes de las vacaciones. Intenso, porque la Fórmula 1 viaja este fin de semana hasta Alemania y, acto seguido, se desplaza hasta Hungría para cerrar en Budapest la primera vuelta de una Liga de 19 carreras. Para la Fórmula 1 en agosto cierran las fábricas por decreto de la Federación Internacional para ahorrar costes, y el Mundial queda en el aire, a la espera de las ocho citas de la segunda tanda. En el aire, si es que Sebastian Vettel lo permite. A Fernando Alonso, tercero, ya le saca 92 puntos, obviando los 80 que le lleva a su compañero Webber, que nunca le robará el título.

En Ferrari echaron el resto en los últimos meses y llegaron a la carrera de Silverstone con otra cara. Tan diferente que Fernando Alonso ganó y disfrutó por primera vez en todo el año de un monoplaza para tratar de tú a tú a los Red Bull de Vettel y Webber. Y no se quieren parar ahí. Para este fin de semana en Nurburgring habrá más novedades. No será un paquete tan amplio y revolucionario como el de Inglaterra, adonde se llevaron un alerón trasero nuevo, pero sí lo suficiente para intentar mantener el pulso con los coches energéticos, dominadores sin compasión durante toda la temporada. «Hemos trabajado muy duro los últimos cuatro meses y es una gran satisfacción comprobar que el esfuerzo ha merecido la pena», asegura Pat Fry, director técnico de la escudería.

Fry asumió con la temporada comenzada el puesto de Aldo Costa, primero relevado a otras tareas y ahora ya desvinculado del todo del equipo. «Lo que vimos en Inglaterra fue una gran recompensa para todo el equipo, para los que están ahora y para los que han estado con nosotros», dijo tras la carrera Stefano Domenicali, director de la Scuderia, en clara referencia a Costa.

Con 92 puntos por descontar, Alonso necesitaría una segunda parte de temporada demoledora para poder disputarle el Mundial a Vettel. El alemán no falla. Si no gana, termina segundo, como pasó en las tres carreras que no estuvo en lo más alto. «La victoria de Silverstone no debe hacernos cambiar el enfoque, ni estar mirando continuamente a la clasificación», advierte Fernando Alonso desde su blog en la página web del equipo. «Prefiero no hacer ningún balance, aunque ya estamos cerca de la mitad del Campeonato», dice. «Tuvimos un inicio complicado, pero desde hace unas cuantas carreras hemos vuelto a ser competitivos».

Se queda Fernando Alonso con las sensaciones que le ofrece el coche, mientras el presidente Montezemolo le da un nuevo espaldarazo al cuestionado Felipe Massa. «Seguirá con nosotros la temporada que viene», avanzó para apagar las voces que colocaban al brasileño fuera del equipo. «Ferrari tiene problemas más importantes que decidir su pareja de pilotos».

El mensaje iba directo al corazón de la fábrica de Maranello. No quiere otro año, como también les pasó en 2010, en el que se pasen media temporada a remolque para tener que intentar una remontada a la desesperada en el segundo tramo del Mundial.