Los nervios y las imprecisiones gobernaron un partido en el que había mucho en juego por ambas partes. El Candás se jugaba más, puesto que una derrota le hubiera puesto muy complicada la salvación, pero el Tapia tenía en su mano dejar casi certificada la permanencia. Al final, los tres puntos sumados por el Candás no hacen sino apretar mucho la zona de abajo. Hay cuatro equipos -Candás, Llanes, Industrial y Tapia (del antepenúltimo al decimoquinto)- en tres puntos y que están llamados a pelear por evitar la plaza de descenso que aún queda en juego, ya que Navarro y Navia ya tienen muy difícil la salvación.

La primera ocasión local llegó una vez sacudidos esos nervios del inicio y gracias a una buena acción individual de Pelayo, cuyo disparo desvió Kevin a córner. Dio la replica el Tapia con una jugada personal de Martínez que golpeó fuera pegado al poste izquierdo. Y en el 23 llegaría el gol del partido en una jugada desgraciada para el Tapia: una falta lanzada al área por Dani Peláez, que Castillo está a punto de rematar y que el Tapia no acierta a despejar y al final la pelota le llega a Isma que solo tiene que empujar el balón a gol. Tras el gol, el Candás supo controlar el partido y evitar que el Tapia creara peligro.

La segunda parte siguió por los mismos derroteros y el Candás fue generando más ocasiones al irse el Tapia arriba en busca del empate. Tuvo el Candás un par de ocasiones más con una nueva jugada individual de Pelayo, que disparó alto; y la más clara una de Fer que no fue capaz de batir a Kevin. Al Candás ayer solo le faltó rematar el partido para no mantener la incertidumbre hasta el final.