Javier Fernández y Alfredo García Amado, el núcleo duro del consejo de administración rojiblanco, le pese a quien le pese, están convencidos de la viabilidad del club. Ambos han estado estos días en Madrid donde han mantenido contactos en las diversas vías de negociación que el club mantiene abiertas para encontrar una salida. La primera y más urgente pasa por conseguir un aplazamiento con Hacienda. El club se muestra dispuesto a poner como garantía parte de los derechos de televisión, que se negociarán la temporada próxima, y otros ingresos. El Sporting va más allá y negocia también aplazamientos de deuda privada, así como renegociar parte de esa deuda. El mensaje que lanzan los gestores del club es que "financieramente hay salida", aunque reconocen que la situación es delicada, pero insisten en que el Sporting ya superó momentos peores.
La segunda vía para la supervivencia pasa por la entrada en el accionariado del club de nuevo capital. Javier Fernández ha mantenido contactos con varios posibles inversores sin que se le haya formalizado ninguna oferta en firme, más allá de la propuesta realizada por "Tu fe nunca decaiga" y que no fue considerada por los máximos accionistas.
La tercera vía pasa por conseguir financiación a través de un crédito, con una cantidad por determinar. El club tiene abiertas dos vías con sendos fondos financieros, uno español y otro extranjero. No se trata de fondos inversores tipo Doyen, sino que funcionan de forma parecida a la de un banco, por lo que no aceptan futbolistas como garantía. El club busca ahora un aval bancario que puede llegar por diversas vías. Lo habitual hasta ahora, en el último recurso, es que la mirada se vuelva hacia el propio Fernández, quien ya avaló varias operaciones similares.
La última vía, pero ni mucho menos la más importante, son los recursos que el Sporting tiene presentados ante el Tribunal Económico Administrativo Central (TEAC). El club le ha planteado a la Agencia Tributaria unas formas de pago alternativas que se retrotraen a todas las actuaciones y procedimientos incluidos en los recursos. El consejo de administración tiene muchas esperanzas en un fallo favorable que "cambiaría radicalmente el escenario" y dejaría al club prácticamente al día de los pagos con Hacienda. El principal inconveniente es que el TEAC no tiene una fecha tope para emitir su fallo, que puede no llegar antes que los vencimientos con Hacienda.
Para varias de las fuentes consultadas, los recursos presentados ante el TEAC pueden ser la clave de la viabilidad del Sporting a medio plazo. El club no descuida ninguna de estas vías de buscar su supervivencia. A pesar del clima de tensión social y de la preocupación del sportinguismo, los gestores están convencidos de la viabilidad de la SAD.
